-¿Qué es lo quiere usted?,ya ni el sol puedo tomar tranquila en esta casa-. Mikaela,mostró un gesto altivo muy propio de ella.

-No le voy a quitar mucho tiempo-.Se plantó frente ella y la siguió interrogando-¿Alguna vez tuvo usted algún problema con la víctima?

La mirada de ella permaneció fría y desafiante tanto que por un momento intimidó al hombre uniformado,que aún así persistía en sus preguntas.

-¿Notó usted algo sospechoso ese día?-. inquirió el policía con tono serio.

Mikaela frunció el ceño antes de responder con un desdén evidente.

-Dejen de preguntar tanta tontería y terminen de encerrar a esa mujer. Isabella es la única culpable de ese homicidio-. Su voz sonaba firme y enérgica, mientras insistía con determinación en que Isabella era la presunta asesina que ellos buscaban.

El policía, sin dejarse intimidar, se apartó ligeramente, permitiendo que la luz del sol iluminara el esbelto cuerpo de Mikaela,quién lucía un biquini diminuto.

-¿Qué te hace pensar en la culpabili