Luau 

No, no dormí. Pasado el mediodía Axel se despertó. Estaba sentado en el porche, mirando el mar que estaba muy cerca. Ya había desayunado y vestía un diminuto biquini. Ya no importaba. A Axel no le importaba lo que vestía. Si caminara desnuda por el complejo ni siquiera le importaría.

Me besó en la frente y dijo:

- Buenos dias querida.

Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP