—Es una cama preciosa—, dijo Alanna desde detrás de mí, haciéndome dar un respingo.—Sí, me gusta. ¿Te importaría si compro dos para los chicos? —. pregunté, observando su cara para ver su reacción.Su cabeza se giró para mirarme, con la sorpresa claramente escrita en su rostro. Estudió mi cara, intentando decidir si hablaba en serio o no. Le sonreí, asegurándole que hablaba en serio.—Van a necesitar una habitación aquí, Alanna. Sé que has estado yendo y viniendo entre la casa de tus padres, la de Fernando y la de Louis y Megan, y sé que sabes que tienes que decidir dónde quedarte permanentemente ahora que los chicos estarán contigo. Sea donde sea ese lugar, necesitarán su propia habitación. Estas camas pueden ser el principio para que eso ocurra —le expliqué, razonando con ella.Mientras recitaba mi pequeño discurso, pude ver cómo asentía con la cabeza. —Tienes razón. Cuando papá se despierte, pienso quedarme con él y con mamá. Aún no sé qué pasará con los niños. Papá va a necesita
Ver a Natanael y a nuestros hijos interactuar por primera vez es algo que nunca olvidaré. Los miraba como si fueran las únicas personas del mundo y haría cualquier cosa por ellos. Al verlos, me di cuenta del gran error que había cometido. Sí, me hizo daño, pero no tenía por qué privarle a él y a nuestros hijos de esta relación que estaba empezando a desarrollarse. Parecían tan felices y me hacía feliz verlos así.—¡Alanna! —, gritó una voz y lo siguiente que supe fue que me levantaban en el aire y me hacían girar.—¡James! Te he echado de menos—, dije riendo mientras me ponía de pie.—Yo también te he echado de menos, Alanna. La vida es aburrida sin ti, aunque algo me dice que tendré que acostumbrarme. Tengo la sensación de que no vas a volver&mdash
—Acabo de recibir un mensaje de Rox. Quiere que nos encontremos en Fernando's—, dijo Natanael, haciendo una pausa en su juego con Asher. Al otro lado, Caín se había quedado dormido en su asiento del coche, con la cabecita apoyada en el lateral del asiento.—¿Dijo por qué? — pregunté, dando la vuelta para ir a casa de mi hermano.—No. Sólo dijo que nos viéramos allí. Taylor también me envió un mensaje diciendo que nos encontraríamos allí. Va a dejar a Chloe y a Kyle en el hospital—, respondió.Asentí con la cabeza y giré la camioneta hacia la entrada de Fernando. Encontré un sitio junto al camión de Erick y aparqué allí. Apagué la camioneta antes de enrollar las llaves alrededor de mi mano y deslizarme fuera de la camioneta. Me dirigí a la pu
Jen y Parker habían llegado con mi camión unos cinco días después que James. No podían quedarse y acababa de dejarlos en el aeropuerto cuando llegué al hospital. James había decidido quedarse ya que vivía con Kyle y Kyle se quedaba por Chloe. Se llevaba muy bien con todos. Natanael tuvo algunos problemas de celos al principio hasta que le aseguré que James estaba saliendo felizmente con Jen. Después de eso, se hicieron amigos, sin problemas. Se alojaba en casa de Louis y Megan.Kyle había conocido a Fernando y Erick, junto con todos los demás. Fernando y Erick le dieron la típica charla de hermano mayor, mientras Kyle se quedaba de pie con cara de estar preparándose para recibir un puñetazo. Yo me quedé a un lado con James, riendo. Kyle no estaba muy contento con nosotros, pero se le pasó enseguida. Todo el mundo se llevaba bien y se lo pasaba m
—¿Por qué no los llevas a casa y los metes en sus camas? —. preguntó papá después de un minuto.—No quiero dejarte, papá. Te acabas de despertar—, protesté negando con la cabeza.—No me voy a ninguna parte, cariño. Tienes que llevarlos a sus camas. Vuelve más tarde, cuando estén despiertos, para que pueda ver a mis nietos más pequeños. Está bien, cariño, puedes irte—, me tranquilizó papá, empujándome suavemente para que me pusiera en pie.—Vale, papá. Hasta luego. Te quiero—, dije, acomodando a Caín en mis brazos para poder inclinarme y abrazarlo.—Adiós, cariño. Yo también te quiero—, respondió.—Hablaré contigo más tarde Natanael. Pás
—¡Alanna! ¿Has traído a mis primitos a verme? — preguntó Jeremiah, apareciendo en nuestra mesa.—Si eso es lo que quieres pensar, Jere, entonces sí—, respondí, lanzándole una sonrisa pícara mientras colocaba a Asher en su trona.—Me rompes el corazón, pequeño—, exclamó Jeremiah, llevándose dramáticamente la mano al corazón.—Reina del drama—, repliqué, poniendo los ojos en blanco.—¿Qué queréis tomar? —, preguntó, decidiendo hacer realmente su trabajo.—Un Dr. Pepper y leche para los chicos—, respondí.Jeremiah asintió, anotándolo antes de volverse hacia Natanael.—Tomaré lo mismo que ella—, respond
—Vamos, nena. Vamos a subirte aquí con papá—, dije dejando a Asher en el portón trasero.—Ven aquí, amiguito—, dijo Natanael, cogiendo al niño en brazos.Recogí a Caín del suelo y se lo entregué a Natanael, que lo colocó junto a su hermano antes de darse la vuelta para tenderme la mano. Cogí la mano que me ofrecía y me subí a la plataforma del camión. Me acerqué a los chicos mientras Natanael se agachaba y abría el portón trasero.—No quiero que bajen directamente del camión—, dijo Natanael tímidamente cuando me vio mirándolo.—Estoy de acuerdo—, dije, poniéndome cómodo mientras los preestrenos empezaban a terminar.Natanael se sentó a mi lado, ambos apoyados en la cabina del cami&
—¡Alanna, espera! — Carson me llamó.Seguí caminando, sin detenerme, aunque oía sus pasos detrás de mí.—¡Alanna! —, gritó, alargó la mano y me agarró del brazo, haciéndome girar para mirarle.—¿Qué Carson? — pregunté, sonando cansada y exasperada.—Cálmate, pequeña. Todo va a ir bien—, intentó asegurarme, con las manos en los hombros para mantenerme en mi sitio.—Quiero creerte, Carson, de verdad. Pero no puedo. Acabo de poner mi vida en orden y puedo pasar el día sabiendo que soy feliz. La vuelta de Cannon va a desequilibrarlo todo y ahora mismo no puedo soportarlo—, respondí, negando con la cabeza.—Vale, osita Alanna, cálmate. Subamos al camión y v