Narra Iván Owen’s.Sábado, 8, agosto, 2035.Me muevo en la cama después de una entretenida madrugada, intento busca a Victoria con la mano pero siento mi cama vacía así que abro mis ojos y me siento mirando a mi alrededor, me levanto tomando unos bóxer para salir de mi habitación, capaz este en la cocina. Cuando llego no está, no está en ninguna parte del apartamento.De pronto comienzo a asfixiarme como si empezara a tener un ataque de ansiedad, caigo al suelo sintiendo la vista nublada para después caer en un abismo, oscuridad es lo que noto hasta que de pronto me veo caminando de la mano de una mujer que me sonríe, tiene el cabello rubio y ojos del color de la almendra, podría decir que son como mis ojos, veo la calle por donde caminamos.Puedo notar la casa de mi madre Max pero siento que es la primera vez que estoy aquí, miro la puerta frente a mí que se abre mostrando a un muchacho de unos 18 años, castaños con pocas pescas en su cara, ojos chocolate y mirada confundida, ¿Por qu
Narra Iván Owen’s. Abro la puerta saliendo de la oficina pero no veo a Tory en su escritorio, reviso la hora y es hora del almuerzo, supongo que está en la cafetería de la empresa o en la zona de cocina y descanso que tenemos en este piso, camino hacia la cocina y me la encuentro sola, cierro la puerta y la pelirroja se voltea a mirarme sorprendida. — ¿Pasa algo? — pregunta mirando a la puerta cerrada y luego a mí, niego acercándome a ella — Señor Owen´s… — le sonrío hasta acorralarla. — Solo dime Italo — la veo tragar saliva por mi cercanía, ella cree que no he notado su distancia repentina y puedo pensar que solo tuvimos sexo de una noche pero yo no lo sentí así ni quiero que quede así, menos ahora que he recordado todo. — ¿Qué quieres, Italo? — pregunta con seriedad ocultando su nerviosismo, me mira a los ojos y la miro con más determinación, beso su frente, me alejo por completo. Esperare hasta que terminemos los días del contrato para decirle todo e incluso pedirle que sea mi
Narra Matteo Owen’s.Jueves, 24. Agosto, 2044.Me presento, soy Matteo Coromoto Owen´s Rivas, mejor conocido como el rubio amor de tu vida, tengo 21 años, bueno, casi 21, en unos días cumplo años junto a mi hermano gemelo, sí, mi hermano es Joaco.— Teo — parpadeo para mirar a la rubia de Vincí, la sobrina de mi madre, hija del hermanastro de mi madre — ¿Lo haremos o qué? — pregunta mirando el pequeño cuarto de escobas, sonrío acercándola a mí. Puede ser la sobrina de mi madre pero prima mía no es, ni de sangre y si es de ley, me paso por el trasero la ley.— Claro que lo haremos, hermosa — le susurro, sé que esta será la última vez que lo haremos, ya que tiene un noviazgo con el hermano de mi cuñada pelirroja, la cual pronto será la esposa de mi hermano — Que sea rápido, tengo que reunirme con Italo — la acerco para luego arrinconarla contra la pared y comenzar a besarla pero solo fueron unos cuantos besos ya que mi teléfono empieza a sonar con una canción de Mota, me separo un poco
Narra Abigail Owen’s.Jueves, 1, septiembre, 2044.Miro a los lados antes de salir de mi cuarto, son las 7 de la mañana, ya debieron haberse ido mis padres a trabajar, y mis hermanos gemelos, deben seguir durmiendo, si mis cálculos son correctos, Joaco debe despertar en 30 minutos como siempre, salgo con prisa de mi cuarto y justo cuando bajo las escaleras noto a mi madre en el comedor comiendo tranquilamente junto a mi padre, mi madre es la primera en verme.— ¿A dónde vas? — pregunta mirándome de arriba abajo, dudo que me juzgue sabiendo que ella a mi edad se vestía peor que yo.— Saldré con Andrey — respondo, papá me mira y saluda, le pido la bendición y me bendiga, es más que claro que hago esto porque me acostumbre gracias a que estuve un tiempo viviendo con mi tía Liliana y mi prima, encima de que mamá es venezolana, cosas que hacen allá.— Ve a casa de tu madrina Jessica y pídele a Bruce que sea tu pareja de baile en la boda de tu hermano — comenzó hablar levantándose, parpadeo
Narra Iván Owen’sSábado, 3, septiembre, 2044.Verla caminar hacia mí con ese hermoso vestido blanco en forma de sirena, con melena rojiza y grandes ojos marrones brillante mirándome mientras es acompañada con mi suegro, puedo decir que 9 años fueron suficiente para saber que ya no podía aguantar más de tenerla lejos, hace 2 años que nos comprometimos, Tory estaba en Estados Unidos mientras yo estaba aquí en Madrid ocupando de mi propia empresa, la de pequeños guerreros.Apenas mis padres se enteraron que me hice de novio con Tory no me iban a dejar tan fácil, más conociendo al padre de ella, mi madre me puso la empresa a mi nombre en los hombres y mientras ella comenzaba a estudiar leyes, yo estaba aquí haciéndome cargo de algo que lleva mi nombre. Pero eso no nos impedía que yo fuera a verla y que ella viniera a verme en sus vacaciones que la universidad le daba, así estuvimos unos 5 años de relación.Pero al sexto año ella comenzó a trabajar con su padre, aún no podía venir a estar
Narra Abigail Owen’sSábado, 03, septiembre, 2044.El espejo del baño me empieza a molestar. ¿Cómo es que terminé usando un vestido? Por suerte mi cuñada me dejó usar unos tenis sin que mi mamá dijera algún pero, encima de que caminé con Bruce hacia el altar, me sentí rara tomándole del brazo.— Estuviste hermosa y divina hasta que te pusiste esos tenis — escucho a Andrey hablar desde un cubículo, sigo mirando mi rostro en el reflejo del espejo, mi ojo que tiene un lente de contacto me empieza a picar pero no me lo puedo quitar porque dañaría el lente, miro mi cabello tan arreglado. — Te pareces un poco a la princesa esta de la película de Rapl — la miro y sonríe.— Ah, ya sé a quién te refieres, que película más antigua — suspiro moleta por el maquillaje que creo que es lo que me da alergia aquí.— Ya, quítate el lente, se nota que te fastidia — me regaña y suspiro haciendo lo que me dice, mi papá siempre me dice que soy hermosa con mi heterocromía, que no debería sentirme insegura y
Narra Joaquín Owen’s. Observo como mi gemelo coquetea con alguna prima lejana de nuestras cuñada, nos diferenciamos tanto en esa parte de gemelos que somos, miro a mis padres separados uno en un extremo que el otro de la pista, se miran de una manera que se puede sentir que aún se aman como la primera vez, algo que dudo que alguna vez me pase, más sabiendo que soy alguien muy cerrado a todo.Veo a mi hermana salir del baño ya que estoy cerca de ahí, observo que mira alguien de la pista y luego se va corriendo, frunzo el ceño sin entender lo que le sucede a mi pequeña hermana, veo pasar a Andrey con la mirada preocupada, buscando a alguien en medio de la gente, suspira y luego voltea a mirarme, se acerca hasta a mí y comienzo a recordar lo que mi gemelo siempre me dice de la morena pero no le hago caso.Porque sé que Matteo es el gemelo guapo y ligador de los dos.— ¿Has visto a Abi pasar? — pregunta mirando a otro lado buscándola con la mirada, frunzo el ceño.— Creo haberla visto s
Narra Victoria Johnson.Domingo, 4, septiembre, 2044.Mirar su rostro descansar frente a mí, es una de las maravillas de casarse con el amor de tu vida, más cuando llevas muchos años enamorada de esta misma persona, ahora que estamos casado después de 9 años separados por los negocios familiares, el estudio y otras cosas que nos hicieron estar separados, puedo decir que valió la pena a pesar de que sufrí 8 años sin verlo, sin comunicarme, sin saber que me había olvidado a causa de ese accidente.Me sentí tan mal cuando me enteré que por mi culpa, mi amado perdió la memoria y como castigo del destino se olvidó de mí pero ahora estamos aquí, acostados en la cama de la suite de un hotel cinco estrellas de Grecia, que por fin puedo verlo dormir y mirarlo detalladamente desde sus largas pestañas hasta sus hermosas pecas que adornan su masculino rostro junto a su castaño cabello.— ¿Ya terminaste de mirarme, esposa? — pregunta con su voz ronca, me sonrojo mientras abre sus ojos marrones qu