Cuando la primavera llegó a la ciudad del este, trayendo consigo el buen clima y todas las flores, también llegaron las épocas preferidas para las bodas en la ciudad.

Y con ese buen clima, Luka e Ivan se notaban increíblemente emocionados y contentos, ya que en su hogar, en la ciudad del norte, ese clima tan caluroso no era nada común para nada. Así que Luka e Ivan se veían sorprendidos siempre, viendo con emoción como las flores florecían y como el césped se volvía verde y brillante.

Y en una época tan especial del año, como era obvio, ellos planearon realizar su boda.

Habían pasado prácticamente 2 meses desde que Luka, Ivan y Sacha se mudaron a la ciudad del este con sus alfas, y en todo ese tiempo, Luka pudo vivir una vida feliz y tranquila, como esa que había soñado desde que solo era un niño. No solo porque podía ser feliz fin