Punto de vista del autor....

Alice tragó saliva agarrándose el cuello. La marca. La marca de Ezequiel dolía mucho. Sabía por qué le dolía tanto, pero no tenia el corazón para aceptar la verdad. Cerró los ojos al sentir la presencia de Ezekiel cerca de ella.

Sin pensar en nada más salió corriendo de la habitación con sus ojos hinchados e inyectados en sangre mirando desesperadamente a su alrededor. Justo cuando se sintió extremadamente cerca de él, sus pies descalzos se detuvieron.

Llevaba un vestido blanco que le llegaba hasta los tobillos, tenia el pelo suelto y no calzaba zapatos. Sus ojos chocaron con los llorosos de Dylan. El hombre instantáneamente miró hacia otro lado sin poder tener la fuerza para revelarle la dolorosa verdad.

Camino cerca de él con sus pasos duros. Dylan y Robert estaban parados allí. Robert parecia impotente. Estaba demasiado avergonzado para enfrentarse a su reina. Se suponía que debía proteger a su rey, pero no pudo.

—¿D-dónde está? —ella murmuró mirándolo