pueden decirme que les parece la historia de Thiago y Joselyne. A mi me encanta, los leo.
[Joselyne] -------------Dos semanas después----------------- Cuando ves la vida de todas estas personas, algo impacta en tu contra. He estudiado medicina por mucho tiempo, siempre he dedicado mi tiempo a investigaciones que puedan llevar al ser humano a volver a caminar. Pero la verdad había olvidado que elegí esta profesión para salvar vidas, no solo para mejorarlas. Los niños de la aldea, cada día se ven mas fuertes. Tengo mas de ocho días enseñándoles a hacer un poco de lo que hago, para cuando me vaya, ellos puedan seguir teniendo vitaminas, medicinas básicas. — Doctora —me llama un pequeño mostrando su dibujo— ¿Cree que a mi mamá le guste? — Claro que si —sonrío. En mi campo de visión aparece Thiago, quien se encuentra dando ordenes a sus hombres. Creo que cada día que pasa, me acostumbro a verlo más. Cuando lo vi la primera vez, creí que era un hombre tosco y machista, pero no, solo es tosco, tonto y hace malos chistes negros. Es difícil imaginarme al señor Elric con este
[Thiago]Aurora me abraza más de lo que prefiero, así que pienso en alejarla hasta que veo la mueca que la doctora le ha dedicado, juraría que está celosa. ¿Es posible?— No hagas esto de nuevo, sargento —le ordenó susurrándole al oído. — Disculpe general, se me olvida que estamos ejerciendo —me suelta— te he extrañado, estoy rogando que esta estúpida misión termine. — Disculpe general, pero viene apresurándome todo el maldit* camino, puede llevarme hasta el enfermo y después siguen haciendo esto… —señala Joselyne a los dos. — ¿Y está quien diablos es? —pregunta molesta por el tono que ha usado Joselyne— ¿De dónde sacaste a esta mujer, Thiago? — Su esposa y la doctora que puede salvar sus vidas —espeta Joselyne— ¿Dónde está el enfermo que no quiero seguir perdiendo el tiempo en explicaciones que no debería estar dando? — ¿Ha dicho que es tu esposa?Aurora se gira hacía mí, siento su mirada, pero solo puedo ver a Joselyne, que se ha dado la vuelta para entrar a la aldea que está fr
[Lamento la espera, me tomé los primeros días de descanso. Después se me descompuso mi teclado, pero ahora ya está todo listo para comenzar. Mi planeación son dos capítulos diarios, así que estén atentas. Gracias por leerme y espero leer sus comentarios] [Joselyne] La noche fue demasiado larga para mí. Desde el día que nos “casamos” yo no había dormido con Thiago, tenerlo tan cerca de mi, desencadenó muchos recuerdos de aquella noche juntos y borrachos. A decir verdad, pude haberlo detenido, pero no quise intentarlo, realmente en aquel momento tenía la mente en blanco. Cuando el sol salió, me levanté y salí de aquella calurosa choza. Thiago parecía dormido, así que ni siquiera hice el menor ruido. Caminé entre nativos hasta llegar donde está mi enfermo. — Buen día, capitán —saludé cuando entré— ¿Cómo te sientes hoy? — Siento que mucho mejor, sabía que solo me hacía falta ver otro rostro diferente a lo que estoy viendo desde hace meses —sonríe con dificultad— El estomago me duele
[Thiago] Deseo besarla, pero me siento tan enojado que decido solo separarme. Ella no me responde, así que me quito la ropa para solo acostarme. El alcohol hace que mi cerebro no funcione de la mejor manera. Cuento los minutos hasta que ella se acuesta a mi lado. Mi respiración me delata, siento mi pulso acelerado y deseo tocarla de nuevo como aquella noche e que nos casamos. Aunque se que eso no funcionaría hoy. — Estoy ardiendo —murmuro— Estoy ardiendo en dos cosas, Joselyne. Lo diré una sola vez, porque siempre me ha gustado ser directo. — No quiero seguir hablando contigo, Thiago. — Debes escucharme o sentiré que… — Lo que sientas no me importa —me interrumpe— Estoy cansada, se supone que debes estar para cuidarme. Estoy harta de sentir que no tengo espacio, pero también de sentir miedo. Esta mujer es demasiado imposible, con razón es doctora. Me doy la vuelta para decirle que sus verdades, pero no esperaba ver sus ojos rojos. Algunas lagrimas caen en sus mejillas, por muy
[Joselyne] Nunca un persona me ha caido tan mal como esa mujer rubia. Aurora me mira de una forma que no me gusta. Al ser doctora he aprendido a ser demasiado paciente, pero Aurora y Thiago está llevando al límite todo. La respiración se me dificulta cuando el agua hace que el polvo se levante, mis pies se entierran en algunas partes, haciendo que haga mas esfuerzo al caminar. No quiero que volvamos a tomar un descanso solo por mi, me hacen sentir tan mal. — General —escucho que un soldado le hablar a Thiago— Son un grupo de rebeldes, se dirige a esta dirección. — Debemos hacer algo. ¿Nos siguen? —responde Thiago haciendo una señal con su mano que hace que nos detengamos. — No hay forma, la lluvia borra nuestro rastro. Mi ropa está mojada, aún así siento sudor en mi cuerpo. Estoy agotada. Me dejo caer en el suelo mojado, necesito sentarme y descansar en lo que ellos discuten.— ¡Necesito opciones viables ya! —exige, haciendo que los capitanes se acerquen. Dejo de poner atención
[Thiago] Me repito una y otra vez que estoy perdiendo demasiada sangre como para querer matar a los soldados que desobedecieron mi orden de mirar al suelo. Mi autocontrol está al límite, ella hace y deshace cosas. Mientras lo único que puedo mirar es su cuerpo y dos razones que llaman mi atención como un sucio depravado. La doctora Joselyne no es una nerd cualquiera. Tiene hermosas cualidades que le hacen resaltar, pero su inteligencia es algo grande, como todo lo que tiene. — ¿Por qué me haces esto? —murmuro para que solo ella escuche. — Estás pálido, has perdido mucha sangre —ella presiona la herida— Te va a doler Apenas dice eso y siento como ella mete la tela dentro de la herida, presionándola para detener el sangrado. El dolor es tan agudo, que me duele la cabeza. No puedo cerrar los ojos. No puedo cerrar los ojos, en eso me concentro. Si lo hago, no podré ver quien la mira, debo saber a quien debo castigar. — Listo, esto resistirá hasta llegar. Pero debes ser tratado —Jo
[Joselyne] Se que algo ha cambiado desde ese momento en que estuvimos juntos, pero puedo asegurar que me siento de esta forma por todo lo que hi vivido. La sangre en mis manos es prueba viviente de lo que digo y pienso. Levantó la vista y ver a demasiados heridos por una guerra que lleva años y no parece acercarse al fin, es algo que me triste. A eso atribuyo que quizá siempre quiero estar cerca de Thiago. Todo el tiempo lo pienso, lo observo. Me molesta que Aurora esté cerca de él, porque es una mujer que no me agrada, no porque tenga celos. Hakim permanece a mi lado en lo que termino de cocer una herida a un nativo. Hakim me ayuda traduciendo a los que no hablan más que árabe, así que me sirve tenerlo muchísimo. — ¿No tienes hambre? —le pregunto — No. Hakim ha ido perdiendo el apetito y yo no he podido hacer mucho para ayudarlo. He tratado de convencer a Thiago, pero solo se ha negado. No tengo idea de lo que debo hacer o no. Tomo a Hakim de la mano para irnos al laboratorio
[Lamento la espera, este fin de semana tendrán los capítulos retrasados. Gracias por leerme. Tengo que cumplir con una cuota de palabras que yo misma me he puesto. Por lo que quizá el costo por capitulo suba un poco, debido a que los haré un poco más largos(esto lo decide el sistema, no yo)] [Joselyne] Apenas tengo la fuerza para alejarme, mi respiración está agitada y siento un dolor creciente en la parte baja de mi vientre. Puedo sentir mi cara roja, si Hakim no estuviera aquí, puedo jurar que Thiago no tendría ropa ya. — Sé porque te detuviste, quiero que sepas que no tengo el autocontrol que tu tienes —sisea en voz baja y ronca, Thiago— No juegues conmigo si no darás el siguiente paso. — Lo siento. Mis disculpas suenan tan tontas, que ni siquiera sé porque digo eso. Tal vez porque en verdad lo siento, lo siento por no poder seguir. No quería separarme de él. — No importa —espeta acomodando su uniforme— Saldré a poner los castigos que tengo pendientes. — ¿A quién? — No soy