Austin prácticamente se escapó de lo que sintió al besar a Brooke, no estaba preparado para que su cuerpo reaccionara tan efusivamente al tenerla en sus brazos, se decía que debía respetar su relación con Lauren, él no era particularmente un conquistador y, aunque muchas mujeres se acercaban a seducirlo, nunca cedía.Pero no pudo o no quiso resistirse a probar los labios de la madre de su hijo, sin embargo, ahora le asustaba lo que le hizo sentir, no podía dejarse llevar por un arrebato, porque así lo consideraba, un arrebato que debía pasar al olvido de inmediato.Llamó a Jared para que se quedara a cargo de la oficina y se fue directamente a buscar a Lauren a la agencia de modelaje, al tiempo que mandaba a preparar su avión, se iría de viaje con su chica, eso necesitaba, un tiempo a solas con su novia para volver renovado y concentrarse en su empresa, el hecho de que iba a ser padre no tenía porque desviarlo de su ritmo de vida.*** –Lauren, Lauren… –¿Qué pas
Cuando Austin despertó, se sentía mejor y al sentarse en la cama vio que ya todo estaba limpio y una sonriente Lauren lo miraba desde la puerta de la terraza. –Hola esposo, ¿ya te sientes mejor?, mandé a preparar el avión para que regresemos a la que ahora es nuestra mansión. –Tengo un poco de pesadez, pero tomaré una ducha y nos vamos.Austin no sentía satisfacción alguna al saberse casado con Lauren, volvió a su mente la imagen de Brooke y le preocupó lo que ella podría decir cuando se enterara de su matrimonio. Tomó su teléfono y lo llevó al baño para escribirle a su amigo Jared.Austin Kendall:Amigo, estoy en un lío, me casé con Lauren en Las Vegas.Jared Kimball:¡Carajos!, Austin, no puedo dejarte solo ni un día. ¿Qué puedo hacer por ti?Austin Kendall:Rastréame, no recuerdo nada y Lauren tiene un certificado de matrimonio y un anillo de bodas en su dedo.Jared Kimball:Me preocupas ¿Cuándo regresas?Austin Kendall:Lauren ya mandó a preparar el avión,
Al entrar al edificio administrativo de la cadena hotelera Kendall, su imponente presencia causó que todos guardaran silencio a su paso, así era siempre, apenas ponía un pie en la entrada todos se paralizaban para observarlo. Generalmente entraba por el estacionamiento directo al ascensor del piso ejecutivo para evitar esa reacción.Antes de entrar a su oficina le pidió a su secretaria que le avisara a Jared que ya había llegado, entonces le notificaron que su esposa lo esperaba adentro. –De ahora en adelante, nadie, absolutamente nadie entra a mi oficina si yo no estoy, ¿entendiste? –Sí señor Kendall, lo siento mucho, se identificó y entró. –Él sabía lo arrogante que era Lauren, así que no agregó nada más, seguramente se le había impuesto a la chica. Se dirigió a su oficina y al entrar encontró a Lauren revisando los cajones de su escritorio. –¿Qué buscas? –Hola cariño, busco tu chequera, deberíamos cambiarla para que registres mi firma
Lauren, en la mansión de Austin, se había adjudicado una autoridad que ejercía de forma brusca y desconsiderada con el personal a su servicio. Todo el grupo se dirigía a la señora Angela quien había cuidado a Austin desde hacía muchos años por lo que la consideraban la persona adecuada para hablar con él y expresarle la terrible situación que vivían con su ahora esposa.Habían aprovechado que “la señora” estaba ausente, pero no se percataron de que ella tenía rato de haber regresado entrando precisamente por la puerta de servicio, por lo que se enteró de todo lo que le plantearon a Angela, el resto de los trabajadores.Sorpresivamente apareció, dejando a todos boquiabiertos… –Así que están conspirando en mi contra y piensan ir a contarle todas esas calumnias a mi esposo, ¿no es así? –Señora –intervino Angela–, realmente no estamos acostumbrados a ese mal trato, el señor siempre ha sido muy considerado con nosotros. –El señor no está aquí, yo soy la
Austin llegó directamente a la oficina de su socio y amigo Jared, se hicieron amigos en la preparatoria al estar siempre en los mismos equipos por la similitud de sus apellidos, así que con el paso de los años habían cultivado una muy sincera amistad por la cual confiaban uno en el otro incondicionalmente.Jared al ver el rostro de su amigo, adivinó que atravesaba por un mal momento. –¿Qué pasa socio? –Primero fui a la cita de control de Brooke, con una ecografía confirmaron su embarazo, todo está bien con el desarrollo del bebé, pero ella se ha sentido mal y siento que ha levantado un muro entre nosotros y con mi nueva situación, no sé que podría hacer para acercarme a ella; al salir de la clínica recibí una llamada de Mike porque en la casa surgió un problema y era Lauren que había despedido a todo el personal, de acuerdo a su versión, estaban conspirando para calumniarla ante mí, pero estoy al tanto de que ella los maltrata, cuando estoy es muy déspota con e
Al otro día, cada uno se ocupó en los motivos de su visita, Brooke disfrutaría de un paseo guiado al desierto, aunque rechazó categóricamente la opción de subirse a un camello, lo único que pensaba era en una posible caída y su embarazo, del que no le había comentado nada a sus compañeros.Austin estuvo llenándose de polvo al inspeccionar la locación donde ya estaba demarcado el inicio de la construcción, las fundaciones se plantarían en las próximas horas y estaba muy satisfecho con el avance del proyecto.Brooke regresó agotada al hotel y solo deseaba tenderse en la cama, nuevamente, se cerraba la puerta del ascensor cuando Austin hizo su entrada a la recepción del lugar que quedaba justo enfrente, por lo que, de demorarse unos segundos, la hubiera visto.Parecía que el destino aun no disponía que se encontraran, él también deseaba tenderse en la cama al llegar a su habitación, irónicamente, ambos quedaron en la misma posición, boca arriba con los brazos extendidos y los ojos cerrad
Austin no se había comunicado con los escoltas de su esposa, no obstante, ellos le tenían un informe detallado de sus actividades, porque cada día iba a la agencia de modelaje y al salir visitaba a su “hermano” hasta altas horas de la noche, cuando regresaba a la mansión. Desde la discusión con el personal, no se dignaba ni a mirarlos. –¿Cuándo regresa el idiota de tu esposo? –Pronto, pero no te preocupes, seguiré viniendo igual. –No te pregunto por eso, solo quiero saber por qué aun no tienes acceso a las cuentas. –Se ha escudado en que tengo una tarjeta de gasto ilimitado. –Sabes que eso no es suficiente, me parece que te gusta estar con él, por eso has tardado mucho más que otras veces. –Ya me casé con él, ahora solo necesito que tú te ocupes de la embarazada, para convertirme en la única heredera de toda su inmensa fortuna. –Tu tío ha estado vigilando, pero en su empresa informaron que había salido
Lauren estaba en la tina tomando un baño de espuma, cuando recibió un mensaje con un escueto: “Hecho”, lo que produjo que su rostro se iluminara con una amplia sonrisa.Mientras, Brooke era ingresada de emergencia en estado de shock, el hombre que la trasladó anunció a viva voz que estaba embarazada, también pudo informar el nombre de ella y el nombre de la ginecóloga, él sabía muchos datos porque se encargaba de seguirla desde que su jefe se fijó en ella.Una vez iniciaron su atención, él se tomó un tiempo para informarle a Austin Kendall lo ocurrido, este casi enloquece de la impotencia, por lo que de inmediato comenzó a girar ordenes para regresarse a la mayor brevedad, no sin antes insultar a su hombre por permitir que le hicieran daño a la madre de su hijo.La situación de Brooke era bastante crítica, ya que la herida fue muy profunda y alargada provocándole una copiosa hemorragia, estaba en quirófano donde trataban de estabilizarla antes de intervenirla quirúrgicamente.Austin a