El resto de la mañana, Derek asistió a varias reuniones en las cuales fue acompañado la primera vez por doña Conchita y su aprendiz, pero a las siguientes solo asistió Clarice y él miraba de reojo como ella estaba atenta a todo lo que se discutía y tomaba muchas notas.Llegó la hora del almuerzo y una hermosa chica salió del ascensor, se detuvo en el pasillo y comenzó a empolvarse la nariz, Clarice tuvo intenciones de hablarle, pero fue detenida por doña Conchita. –No te preocupes, eso lo verás con frecuencia, en pocos minutos Derek saldrá y se irá a almorzar muy bien acompañado. –¿Tiene varias novias?, eso no se hace. –Todas son amigas, Derek aun no tiene a alguien especial en su vida. –Ay pobrecito, debe vivir triste. –Oye, tú no vives triste, ¿eso quiere decir que tienes novio?Derek salió de su oficina y pasaba justo frente al escritorio de su secretaria cuando escuchó la pregunta que ella le hacía a la joven, así que, si
Entraron a la tienda y juntas comenzaron a recorrer los pasillos, Clarice estaba maravillada, esta era una tienda muy elegante y de estar sola, la hubiera visto desde afuera sin atreverse a entrar porque se imaginaba que cada prenda de allí resultaría muy costosa para ella. –Por la forma en que te vistes, entiendo que no te gusta lo ostentoso, así que buscaré un traje sencillo y elegante, donde la tela sea la que demuestre su belleza, será largo y lo complementaremos con unos zapatos de tacón bajo para que no te incomode, ¿estás de acuerdo? –Sí, me imagino todo y me entusiasma. –Ay niña, eres adorable. Oh, discúlpame un momento, debo atender esta llamada.Clarice quedó sola en el pasillo y observaba los trajes, cuando una chica con una plaquita de identificación se acercó a ella y mirándola de pies a cabeza, le dijo: –¿Puedo ayudarla? –Es muy amable, vine a buscar un traje, pero debo esperar un momento. –No creo q
Al entrar al restaurante notó a las personas elegantemente vestidas y todo el ambiente lujoso y distinguido del lugar, entonces volvió a agradecer mentalmente a las señoras Brooke y Alexa, por haberla ayudado a vestirse acorde la ocasión.Tomaron asiento luego de presentarla y a Derek le resultó un poco incómoda la atención que le prestaron a su secretaria, ella parecía no percatarse del interés que despertaba en los hombres que estaban en esa mesa, acordaron pedir bebidas para iniciar las negociaciones y postergar la cena para el final.Se encontraban en un área privada donde no serían interrumpidos por los meseros salvo lo estrictamente necesario, así que Derek comenzó la ronda de discusiones.Cuando tocó el turno de la contraparte, Clarice participó activamente solicitando aclaratorias en algunas ocasiones, alegando que necesitaba entender bien los términos y condiciones con el propósito de elaborar el informe final de la reunión.Derek la observaba porque sus intervenciones eran m
En los días siguientes doña Conchita siguió entrenándola en las labores de la oficina, pero adicionalmente Derek y ella iban acoplándose en otros asuntos, porque ella se le estaba haciendo imprescindible, incluso en gestiones personales. –Señor, sus vitaminas. –Señor, sus trajes –decía colocando la ropa en un perchero de su oficina. –Señor, el almuerzo, ya es tarde y no debe dejar pasar la hora de comer. –Señor, ya envié el obsequio para la señorita Cinthya, es un hermoso brazalete. –Señor, su cita con la señorita Cinthya.Así era cada día, hasta que una tarde le anunció: –Señor, hoy es la cena con los padres de la señorita Cinthya. –Está bien, gracias Clarice…, espera un momento. ¿Cuál cena con los padres de Cinthya? –Señor, ella me llamó hace dos días para que colocara en su agenda de hoy una cena con los padres de ella. –¿De dónde sacaron ustedes que yo quería cenar con ella
Derek tuvo que esperar casi media hora en una sala donde cada cierto tiempo aparecía una mujer ofreciéndole algún refrigerio. Él rechazó todo, porque estaba de muy mal humor por tener que perder tanto tiempo en ese lugar, pero tampoco quería desperdiciar la oportunidad de aclarar las cosas con Cinthya, aunque debía reconocer que sus acciones pudieron haberla llamado a confusión.Cuando se reunieron y salieron de allí, él no sospechaba que Cinthya les había dicho a todas las presentes que tenía prisa porque su hermoso y multimillonario novio que, posiblemente esa noche se convertiría en su prometido, estaba esperando por ella.Se enganchó de su brazo, a pesar de los vanos intentos que hacía él por zafarse de su agarre. –¿A dónde vamos hermoso? –A “La Terraza” –dijo para ella y para el chofer–, allí te aclararé algunas cosas.Ella presentía que algo no estaba bien, pero tampoco quería reparar mucho en la actitud de él, por nada del mundo cambiaría los planes que
Cinthya no permitió que Derek la llevara, tomó un taxi y sin voltear a mirarlo, le dijo con mucho drama: –No te preocupes por mí, seré fuerte para mi hijo, ah y la cena de esta noche queda cancelada.Derek se quedó en la acera observando al auto alejarse, no se sentía bien con él mismo actuando así, pero tenía la total convicción de que no se casaría con ella solo por el embarazo, simplemente no la amaba como para convertirla en su esposa. –¿Se puede saber con quién te vas a casar pronto? –le preguntó Marlon. –No estoy comprometido, todo eso lo dije para zafarme de Cinthya. –Pues ahora tendrás que inventarte otra cosa para justificar que no te casarás, por lo que ella puede insistir en el compromiso y ahora embarazada, le resultará más fácil llamar la atención. –Estoy pensando en alguien que tal vez pueda ayudarme con esto. –Derek, ninguna de las chicas que conocemos se prestará para tu invento, a menos que te cas
Derek caminaba de un lado a otro detrás de su escritorio, pasaba las manos por su cabeza y trataba de encontrar un argumento que lo ayudara a convencer a Clarice de aceptar su plan.Él sabía que ella era perfecta, una mujer seria y sensata que no abusaría de su posición, estaba seguro de que podría casarse con ella y que, llegado el momento de disolver todo, Clarice se separaría sin causar problemas. –Puedo pagarte, dime cuánto quieres –fue lo último que se le ocurrió decir. –Señor Kendall, si estuviera pidiéndome algo dentro de mis posibilidades no dudaría en ayudarlo y le doy mi palabra de que no cobraría ni un centavo por eso, si somos bondadosos con nuestros semejantes estaremos siempre bajo la gracia de Dios. –Solo tú puedes sacarme de este problema Clarice. –Déjeme pensarlo entonces, buscaré consejo porque usted me está pidiendo mentir y eso me atormentará todo el tiempo. –¿Consejo?, no puedes contarle a nadie de esto,
Derek se quedó de una pieza ante lo dicho por su madre, apuró el contenido del vaso de una sola vez y pasó ambas manos por su cabeza, quería decirles que había ideado una salida, pero pensó en que eso empeoraría drásticamente su situación ante sus padres.Se consideraba un hombre hecho y derecho, con éxito tanto profesional como personalmente, independiente y tomando siempre buenas decisiones, hasta el momento en que ese médico anuncio el embarazo de Cinthya, allí perdió un poco la cordura y ahora, la sentencia de su madre le acababa de dar un golpe de realidad.Austin también estaba procesando lo dicho por Brooke, le parecía una medida extrema obligarlo a casarse con una mujer que su hijo no amaba, así que intervino para decir: –Brooke, no estoy de acuerdo en obligarlo a casarse con esa chica. –Yo no dije nada de casarse, claramente anuncié que se hará cargo de la chica y de su bebé, ¿en qué sentido?, bueno estará al pendiente de ella en cuanto a su control pr