Ambos hombres se quedaron callados por un buen rato, hasta que José volvió a romper el silencio. — Promete que pase lo que pase, no te separarás de ella. Solo te tendrá a ti, después de que yo ya no esté ella, se sentirá sola, al fin de cuentas ella todavía es joven y le costara trabajo entender porqué actúe de esta manera. — dijo José, solo que el silencio de Agustín lo puso nervioso. — No diga esas cosas por favor, usted estará con no nosotros por mucho, mucho tiempo, y no se preocupe por Anna, siempre estaré para ella. — respondió Agustín. José al escucharlo, respiro, ni siquiera se había dado cuenta que había dejado de hacerlo. — Gracias Agustín, yo sé que no me equivoque contigo, Anna y tu serán muy felices, de eso estoy muy seguro. Bueno ya no te quito mas tu tiempo me retiro. — dijo José, levantándose y estrechando la mano de su yerno. — Está bien y no se preocupe, todo estará bien, puede estar tranquilo. — José sonrió y salió de la oficina de su yerno. Agustín se quedó s
Para Anna seria otra noche sin dormir, extrañaba mucho a su nana y a su padre, extrañaba su casa, sus cosas, su cama, sus cosas. Agustin salio de su estudio y pensaba en ir a la habitacion de Anna, pero se imagino que tal vez ya se habia dormido y no queria molestarla, así que se fue a su habitación a descansar. Pronto amaneció, Agustín como todos los días se preparo, para irse a la oficina.Agustin fue a ver a Anna, Toco varias veces en la habitacion, pero ella no contesto. Entonces se preocupo empezo a gritarle que abriera la puerta pero nadie contestó, esto intensificó su angustia, ya que Anna siempre tenía algo que decir, pero ese día era diferente. Adentro de la habitacion Anna estaba casi inconciente. La noche anterior como no podía dormir, ella habia decidido darse una ducha para relajarse e inesperadamente se habia quedado dormida en la tina de baño cuando ella reacciono fue por que el agua ya estaba muy helada todo eso le hizo daño ella estaba ardiendo en Fiebre. Agustin
Cuando Agustin regreso a la habitación, Anna se iba despertando, miró aturdida a Agustín que se acercaba a ella. —Anna ¿Cómo te sientes?— preguntó Agustín, pero Anna le respondió con otras preguntas. — ¿Dónde estoy? ¿Qué fue lo que me pasó?— Estás en el hospital, cuando te encontré, estabas ardiendo en fiebre, y te traje aquí. - que le respondió Agustín. Anna parpadeo varias veces, lo único que recordaba era que había salido del baño con mucho frio y se metio a su cama. Agustin llamo al medico para que la revisara, minutos después el doctor entró a la habitación. — Siente algún malestar ¿Cómo dolor de cabeza o dolor de garganta? — preguntó el doctor y Anna negó con la cabeza. — No doctor me siento muy bien. — respondió ella, lo único que Anna quería era salir del hospital.— Eso es bueno, solo esperaremos a que se acabe el suero, y podrá irse espero que ya no se estrese tanto. Esta muy joven para esas cosas — dijo el doctor. Anna se sorprendió. — ¿Cómo sabe eso doctor? — pregun
Agustin llego a casa pensando en todo lo que platico con sus amigos, quería pensar en qué ellos estaban equivocados, pero realmente no estaba tan seguro. Días después. Anna regreso a la universidad, ella entro a clases, mi justo cuando el profesor está a dando un anuncio.— Chicos, les tengo una propuesta, es muy interesante. — Díganos que es profesor. — los chicos preguntaron al unísono. — Bueno en realidad no es una propuesta, es mas bien algo que tenemos que hacer, la universidad a propuesto hacer una excursión a lo largo del territorio mexicano, iremos a cuatro estados esto llevara aproximadamente un mes. - que dijo el profesor emocionado. — Wuoa, eso seria fantástico profe. — todos los chicos en el salón estaban entusiasmados, por ese viaje incluida Anna. — El viaje sera en dos semanas, alisten todo avísenle a sus padres, el que quiera llevar a algún acompañante estará libre de hacerlo sin ningún problema, aquí les doy la información del costo. — dijo el. Profesor, dándoles
Javier no se movió de donde estaba hasta que perdió de vista a las chicas.Las chicas iban platicando, viendo de aquí y allá, habían acordado en que Anna le diría todo a Eva. — Anna ¿Cómo conoces a ese hombre? — preguntó Eva con intriga. — Javier es amigo de tu jefe, y también su abogado. — respondió Anna, dejando a Eva con preguntas en su cabeza. — de mi jefe, por cierto, ¿Tú cómo sabes eso? ¿Cómo conoces a mi jefe? — preguntó Eva. — Bueno amiga mia, tu jefe es el hombre, con el que me case. — respondió Anna y Eva abrió los ojos como platos y detuvo su paso. — ¡¿Qué?! Mi jefe, es tu esposo, te casaste con el soltero mas codiciado del país. — dijo Eva emocionada pero después recordó como fue que eso sucedió y se tranquilizó. — Así es Eva, el es mi marido. — dijo Anna, no muy contenta — Sé que me dijiste que tu padre te obligó, pero dime, de verdad no sientes nada por él, digo es muy atractivo, todas las chicas en el trabajo quisieran que el se fijará en ellas, deberías de ver
Dado que David no pudo obtener ningúna información. Agustin tuvo que ir a la universidad para saber él mismo.- Buenos días señor director, gracias por recibirme. - dijo Agustín, en cuanto lo hicieron pasar, por suerte para él, David había arreglado todo. - El gusto es mio señor Álvarez pero dígame ¿En qué puedo ayudarlo? - preguntó el director. - Quiero saber si la srta Anna Leroy Rivera se ha presentado a la universidad esta semana. - - Bueno no le puedo dar dicha información sr Álvarez usted entenderá. Es para proteger a nuestros alumnos, al menos que usted sea familiar. - Agustín casi se frustra al escuchar aquello, que o le queda más que decir lo obvio. - Entiendo muy bien, la política de mantener la seguridad de los alumnos, pero Anna es mi esposa y estoy preocupado por ella. - el director se quedó estupefacto, conocía a Anna, sabía que la chica tenía sueños y muchos planes pero nunca el cansarse, más sin en cambio, enfrente de él está su esposo, y no sólo eso, su esposo, er
Rodrigo ayudo a Anna a levantarse del suelo y se despidió de ellas. Eva se dio cuenta de la interacción entre los dos. - Amiga, creo que ya ligaste. - dijo Eva y Anna negó con la cabeza. - Que cosas dices Eva. El hombre acaba de salvarme la vida, y tú pensando en esas cosas. - respondió Anna. - Está bien, está bien, pero no creas que no me di cuenta, que ese hombre babeaba por ti, y tu coquetea as con él. - Anna al escuchar a su amiga se sonrojo un poco, pero aun así negó lo evidente. - Eva, creo que el sol esta dañando tu cerebro, que cosas dices ya vámonos de aquí por favor. - dijo Anna para olvidar el tema. - De acuerdo pero después no te quejes, estoy segura que a ese hombre le gustas. - dijo Eva. - Mm.. ¿Y? ¿Si asi fuera habría algún problema? no tiene nada de malo, ademas dudo que lo volvamos a encontrar de nuevo, solo sabemos como se llama y nada mas, ya deja de pensar en eso. - dijo Anna restándole importancia. Las chicas regresaron al hotel para tratar de calmar el sus
Al dia siguiente Anna, Eva y demas compañeros salieron a dar un paseo. Anna al igual que Eva eran dos chicas con espíritu aventurero. Así que se apartaron del grupo y se fueron a aventurar solas cuando regresaban al hotel. —¿Eva a donde nos vamos? ¿Qué podemos hacer de divertido? — preguntó Anna con emoción. — No lo sé aun, hay que buscar a ver que encontramos. — respondió Eva. Las chicas andaban distraídamente observando, cuando sin querer se encontraron con Rodrigo. — Hola chicas ¿Que hacen por aquí? Y solas de nuevo. — Hola, nosotras nos hemos alejado del grupo. Ellos regresarán al hotel y la verdad quiero conocer más lugares — respondió Anna y Eva asintió — puedo preguntar ¿Qué tienen preparado para hoy? — preguntó Rodrigo, pues no tenía mucho que hacer, hasta la noche.— En realidad, aun no lo sabemos. — respondió Anna. A Rodrigo se le ocurrió una idea después de escucharla, ya que estaban las dos solas y no se quedaría a gusto sabiendo eso, decidió llevarlas con él. — H