Harper"¿Qué estás mirando a estas horas de la noche?". La voz profunda me asusta desde atrás."Dios, me asustaste", murmuré, tratando de calmar mi corazón acelerado. "Nunca te me acerques silenciosamente de esa manera".Gabriel camina alrededor de la encimera de la cocina y se para al lado opuesto. En el momento en que lo hace, mis ojos lo ven por completo y mi garganta se seca de repente. Siento sed, como si no hubiera bebido agua en años y tragar se convierte en un gran problema.Gabriel no tenía nada puesto a excepción de un par de pantalones deportivos grises que le llegaban hasta las caderas. El maldito hombre era una obra maestra con el cuerpo de un dios griego con sus anchos hombros, abdominales y esa maldita forma de V que volvería loca a cualquier mujer.Tenía un rastro de pelo oscuro que comenzaba en su ombligo y desaparecía en sus pantalones. Es como si señalara la dirección del paraíso.Quiero quitarle los ojos de encima, pero fue imposible. Mis ojos lo beben como si
GabeMe despierto con un gemido y mi pene está duro como una roca. Mierda, cuando decidí firmar un contrato de matrimonio con Harper, no pensé lo difícil que sería. No tomé en cuenta con cómo me afectaría.Tenía las bolas muy hinchadas y mi pene gritaba por lo dolorosamente duro que estaba.Me levanto de la cama y camino la pequeña distancia hasta el baño, con mi pene señalando el camino. Aún no sé cómo diablos esto es posible. Quiero decir, no soy un maldito adolescente que no puede controlar sus deseos. Ni siquiera puedo recordar la última vez que me desperté con una erección. Sin embargo, no ha pasado ni un mes desde que Harper regresó, y aún así estoy actuando como un maldito adolescente.La verdad es que ni siquiera sé cómo esto es posible. No entiendo cómo puede afectarme cuando nunca antes lo había hecho. Aparte de sus curvas y actitud, sigue siendo la misma Harper que conocí antes, así que no entiendo por qué ahora me afecta tanto.Dejando esos pensamientos de lado, me met
HarperJackson, uno de los choferes de Gabriel, me abre la puerta y entro, Gabriel se desliza a mi lado.Aún no puedo creer que haya accedido a esto, pero en el fondo sé que tiene sentido. Gabriel tenía razón, no había mejor manera de adquirir experiencia dirigiendo una empresa que aprendiendo de los mejores. En lo que respecta a los negocios, Gabriel y Rowan eran los mejores. Incluso superaron a su papá, que se había jubilado, pero seguía siendo el jefe de la junta directiva.Me llevó un tiempo prepararme porque no podía decidir qué ponerme. Trabajaba desde casa la mayor parte del tiempo y cuando iba a la empresa, me ponía ropa informal, ya que la empresa en la que trabajaba era un poco relajada.Quería verme presentable y dar una buena primera impresión. No tenía mucha ropa de trabajo y planeaba ir de compras este fin de semana. El dinero era poco, pero me vendrían bien algunas faldas y blusas.Después de decidir qué ponerme, fui a desayunar. Gabriel me había examinado rápidamen
"Harper, ¿quieres salir del coche? Estás perdiendo mi tiempo", Gabriel me dijo.Levanto la cabeza y lo miro. Tenía el ceño fruncido y se veía impaciente e irritado. Suspiro antes de salir. Este era el Gabriel al que estaba acostumbrada. Frío, arrogante y grosero.Me acomodo la falda antes de tomar mi bolso. Comienza a moverse y lo sigo como un cordero al que llevan al matadero. Estaba tan nerviosa que sentí que mi corazón estaba a punto de saltar de mi maldito pecho.Estaba entrando en el mundo de Gabriel. En su dominio. Era un poco incómodo y aterrador estar en un lugar donde tenía el control total de cada aspecto.Gabriel presiona el botón del ascensor y se abre. Entro, me paro a su lado y trato de calmar mi corazón que late desenfrenadamente."Los únicos que tienen acceso a este ascensor son mi familia, y nos lleva directamente al piso superior donde están nuestras oficinas", comienza, y luego continúa. "Te agregaré al sistema para que no tengas que usar el ascensor común".Est
Él comienza a caminar de nuevo y yo lo sigo."Esta es la oficina de Rowan", dice después que nos detenemos frente a una puerta.Tenía el nombre de su hermano. Asiento con la cabeza, sin estar muy segura de por qué necesitaba saberlo. Claro, voy a trabajar para él, pero ¿realmente necesitaba relacionarme con los otros altos mandos?"Mi oficina está justo al lado de la suya, pero déjame darte un recorrido rápido antes de dejar que mi otro asistente personal te muestre el resto y te guíe sobre lo que harás"."Eso realmente no es necesario... Estoy segura que tu asistente personal puede darme un recorrido. Debes tener mucho que hacer", le digo con una voz empalagosa.Gabriel es famoso por acostarse con sus asistentes personales, y nunca ha intentado ocultar ese hecho.Me molestaba muchísimo cuando estábamos casados. Odiaba saber que era mi esposo, pero no podía mantener su pene en sus pantalones. No es que no pudiera darle sexo si quisiera, pero sabía que nunca me lo hubiera pedido.
"Es un placer conocerla, Señora Wood", dice después de un rato, dándome una sonrisa cegadora."También es un placer", respondo, estrechando su mano. "Y puedes llamarme Harper"."Ya que eso está fuera del camino, Christopher, Harper trabajará contigo. Necesito que aprenda algunas cosas, así que por favor muéstrale todo lo que hay que saber", Gabriel dice, llamando la atención hacia él."Claro que sí, Jefe".Está a punto de darse vuelta, pero luego se detiene. "Y por favor, aún no le digas a nadie que ella es mi esposa. Si alguien pregunta, quédate callado", agrega, antes de rodear el escritorio y tomar asiento.Los ojos de Christopher pasan de mí a Gabriel. Había una mirada de confusión, pero no pude aclararla para él. Habíamos acordado que hasta que los padres de Gabriel lo supieran, no anunciaríamos el matrimonio."Pueden irse", Gabriel nos dijo con voz distraída. Sus ojos estaban puestos en los documentos que tenía en sus manos y ya no existíamos para él."Vamos, Harper", Chri
Cuando Gabriel me dijo que visitaríamos a su familia durante su barbacoa semanal, no pensé que sería tan pronto.Ayer fue un día agitado en la oficina. Estaba claro que Gabriel tenía un grupo de empleadas que querían un pedazo de él. Para ser honesta, no me importó. Él no podía evitar estar bueno. Lo que sí me molestaba eran algunas de las miradas de odio y celos que recibía de algunas de esas mujeres.Si había pensado que Milly era la única que quería reclamar su lugar, bueno, me había equivocado. No puedo decirte la cantidad de veces que algunas mujeres me detuvieron cuando Christopher me había enviado a completar una tarea.Aparentemente, las dos mujeres a las que Gabriel había regañado fueron las responsables de regar la noticia que yo era la nueva mujer de Gabriel. Supongo que su mano en mi espalda baja lo dijo todo. La buena noticia es que todas pensaron que yo era una algo fugaz, y que pronto se cansaría de mí.Ellas sintieron que les correspondía advertirme que no me pusier
Estoy en trance mientras tomo la taza y la llevo a mis labios. Bueno, eso es hasta que su sabor llega a mi boca y termino escupiendo el líquido."Eso es asqueroso. ¿Cómo lo soportas?", pregunto, limpiándome la boca.Por primera vez, escucho a Gabriel reír. Es una risa profunda y sensual que le hace cosas a mi cuerpo. El tipo de risa que te hace olvidar tu nombre. ¿Soy la única que encuentra atractiva la risa?Se encoge de hombros, "Es algo a lo que le adquieres gusto con el tiempo. No es para todos".Es como si hubiera perdido mi maldita voz, así que en vez de eso, solo asiento con la cabeza. Sigo pensando en el hecho que Gabriel se rio. Su risa luego se convierte en una hermosa sonrisa genuina. Una que nunca había visto antes. Es cautivadora y una parte de mí odia que me haya cautivado."¿Estás bien?", se acerca. "Te ves atónita"."Tienes una risa y una sonrisa preciosa". En el momento en que esas palabras salen de mi boca, siento ganas de darme un puñetazo.Apenas que esas pal