¡Ahora Rodrigo se le estaba alejando!

"¿Qué quieres decir, abuelo? ¿Es que ya no te importo?" Emilia escuchó las malas indirectas.

"Si quieres vivir con él el resto de tu vida y caerle bien, tienes que demostrar lo que eres capaz, ¿no?" Ricardo suspiró, "¿Qué crees que puedo hacer si acudes a mí con el más mínimo problema?"

Emilia se mordió el labio, ¡muy agraviada!

"Si te encuentras con algún peligro y te hace daño en camino a la sucursal, esto te permitirá quedarte por ahora, ganas tiempo y luego se te ocurre alguna idea." Ricardo lo había dicho todo, el resto dependía de ella, "Estoy cansado, tú vuelve."

Emilia dijo, "Hoy vine a perturbar su descanso, abuelo cuide su salud, yo misma me encargaré si vuelvo a encontrarme con algo así en el futuro."

Ricardo hizo un gesto con la mano, "Vuelve."

Emilia salió del salón, asegurándose de no poder oír, Ricardo dijo, "¿Crees que Rodrigo se habrá enmorado de ella?"

Cómo se sentía era poco probable.

¡Era tan estúpido!

No creyó que Gabriela tuvi