El hombre gordo miró a Travis antes de colocar una simple caja de madera sobre la mesa redonda. Dentro de la caja había un jade rojo carmesí, aparentemente un tesoro antiguo. Tan pronto como se abrió la caja, todos los presentes sintieron como si el vestíbulo se hubiera llenado con un toque de cálida energía.

Los ojos de todos se iluminaron.

Jasmine se volteó hacia Quilt. "Tío Quilt, ¿qué te parece?"

Quilt lo miró fijamente y asintió. "Creo que es real. Parece ser el Jade Sangriento de la dinastía Zhou. ¡También parece haber sido bendecido por un monje muy poderoso!"

Jasmine asintió y luego se volteó hacia Charlie. "¿Qué piensa, Sr. Wade?"

Charlie, por otro lado, frunció el ceño con disgusto. "Es falso……"

Quilt lo fulminó con la mirada. "Eres solo un joven, ¿quién te dio el derecho de mentir frente a tanta gente?"

Matthew Gibson, el anciano que estaba sentado junto a Travis, abrió los ojos y miró la pieza de jade. "¿Puedo sostenerlo?"

El gordo soltó una risa apática. "Sr. Gibso