Diez minutos después, la anciana utilizó un poco de agua de pozo para extinguir la fogata en la estufa y salió de la casa con Charlie, Isaac y Jeremy.

La anciana miró la puerta deteriorada de la casa con un poco de renuencia. Sabía que nunca regresaría de nuevo después de irse esta vez.

Sin embargo, su hijo no sabía que esto sería una despedida permanente, por lo que simplemente cerró la puerta con cuidado y sin hacer ruido bajo las instrucciones de la Señora Jenson.

Según la Señora Jenson, ellos debían tratar de no molestar a los vecinos para evitar que los demás les hicieran preguntas y se levantara alguna sospecha. Sería lo mejor si desaparecieran directamente.

Afortunadamente, el pueblo estaba completamente oscuro en este momento, ya que era la hora de la cena para la docena o más de hogares en el pueblo. No se encontraron con nadie desde que salieron de su casa hasta que se fueron del pueblo.

Después de caminar por el camino montañoso durante más de una hora, los cuatro lleg