Charlie asintió.

La situación de Kenneth era muy clara para él. Él había destruido directamente sus nervios con una energía exasperante. En otras palabras, nunca sería capaz de recuperar y restaurar su virilidad en esta vida. Anthony no le dio las píldoras mágicas, pero incluso si Anthony le hubiera dado las píldoras, sería completamente inútil.

Si Kenneth insistía en tomar cualquier medicamento indiscriminadamente para tratar de restaurar su propia virilidad, sólo permitiría que el medicamento continuara acumulándose en los nervios, lo que finalmente conduciría a la necrosis tisular.

Parecía como si la familia Weaver estuviera realmente en serios problemas esta vez. Kenneth no sólo era una persona difícil, sino que también era una persona malvada. Nunca se rendiría hasta haber destruido por completo a la familia Weaver.

En ese momento, Isaac dijo: “El segundo joven señor de la familia Webb ahora está encerrado en el Hospital Psiquiátrico Castillo de la Montaña. Se dice que había