Elaine miró a Hannah y se rio al decir de forma burlona: “Mira, Cuñada. Él está tan agitado solo porque dije un par de palabras”.

Hannah curvó los labios y dijo con desprecio: “¿No es ésa la naturaleza y la virtud de todos los hombres de la familia Wilson? ¡Son lentos para actuar, tienen pocas habilidades y poseen un gran temperamento!”.

Elaine aplaudió y dijo emocionada: “¡Cuñada, tienes mucha razón! Cada palabra que acabas de decir es realmente cierta, y realmente resuena en lo más profundo de mi ser”.

Jacob sentía cómo le ardía la cara, por lo tanto se levantó inmediatamente y le dijo a Claire: “Claire, pueden pedir comida de entrega para ustedes. No hace falta que pidas por mí”.

Claire se apresuró a preguntar: “Papá, ¿qué vas a hacer?”.

Jacob dijo furioso: “Ya estoy lleno de ira y por eso iré a mi habitación a acostarme y a descansar”.

Claire se sentía impotente y por eso, solo podía decirle a Elaine: “Mamá, ¿por qué no dejas de hablar?”.

Cuando Hannah vio que Claire no podí