Después del accidente de Sophie, la persona que ella más había extrañado y por la que estaba más preocupada era su hermano, Jaime.

Después de todo, ellos tenían una pequeña familia que estaba conformada solo por los cuatro de ellos. Su madre había estado con ella durante todo este tiempo y su padre había cometido varios errores que ella no pudo aceptar. Entonces, ella naturalmente extrañaba más a su hermano.

Además, ella había pasado por una experiencia de vida o muerte junto con su hermano en Japón en aquel entonces. Así que la relación entre hermano y hermana era mucho más profunda.

Aunque Jaime estaba muy decepcionado, él fingió estar desconsolado mientras le daba unas palmaditas suavemente en la espalda a Sophie y dijo emocionado: “Sophie, es grandioso que tú y Mamá estén bien. Estuve realmente preocupado durante este tiempo…”.

Cuando el abuelo de Jaime, Jefferson, escuchó esto, él simplemente miró a Jaime con frialdad de reojo. Él no podía evitar sentirse más o menos insatisfe