Christopher todavía odiaba mucho a Elaine incluso ahora.

Esto se debía a que Elaine no había quitado los veinte sombreros verdes que colgaban en su balcón.

Ella no solo se negaba a quitarlos, sino que incluso compró en línea un nuevo lote de sombreros verdes. Ahora, ella colgaba más de treinta sombreros verdes en su balcón.

Cada vez que Christopher entraba y salía de la villa de Thompson Primero todos los días, tenía que pasar por la casa de Charlie. Así que, tener que ver constantemente más de treinta sombreros verdes ondeando en el viento todos los días realmente lo enojaba y lo enfurecía.

Además, cada vez que pensaba en cómo Elaine se había estado burlando de él y humillándolo, sentía aún más odio por Elaine.

Había querido buscar una oportunidad para encargarse de Elaine y darle una lección. Al mismo tiempo, él podría complacer y satisfacer a Donald tanto como fuera posible si pudiera causar un poco de caos en la familia de Charlie. Sin embargo, dado que Elaine se había quedado