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El Instituto (Sofia's Insti)

Un día normal (bueno ni tan normal) amanecí de lo más agobiada, casi ni me peiné, y salí con toda la pereza del mundo de manejar

—ah qué ladilla, no consigo donde estacionarme —le doy golpes al volante de mi Volkswagen Fox que me regaló mi padre —hasta que por fin —me alegro —conseguí un puesto

Estaciono tranquilamente, tomo mi mochila (está si parece de chico) y bajo de mi auto, inhalo profundo y comienzo a caminar

Al entrar en el pasillo veo el rebullicio de gente (no me quiero ni imaginar, siempre pasa cuando se trata de una fiesta) pero, como no tengo ánimos ignoró a todo aquel

—Hola Sofía —dice Taylor cuando se acerca a mi —Hola —le respondo con un intento de sonrisa

Taylor es el típico chico nerd de la clase, pero este es el más tímido, no es como los demás sabelotodo y que siempre quiere ser el centro de atención, pues no, Taylor incluso es más sociable, amigable, le gusta hacer amistades y ayudar a muchas personas (un chico común, y a la vez no tan común) a excepción de Abi

Abigail es la chica es la chica de la clase que quiere ser la más importante, ella piensa que el instituto gira entorno a ella, y aunque es mi amiga a veces me cae un poco de la patada por su actitud (por lo menos hoy)

—Hola Sofi —me dice con su sonrisa amplia —Hola Abi —respondo sin siquiera verle a la cara —¿Qué te sucede Sofi? Tienes que levantar esos ánimos, ya hoy es miércoles, ya el viernes culminamos el semestre ¿Sabes lo que eso significa? —sonríe

No estoy de ánimos Abi —digo —¿Puedes por lo menos dejarme tranquila por un instante? —altero un poco la voz mientras busco donde sentarme en la cafetería

—Vaya que si estás de malas —dice Abi —el viernes habrá una fiesta para celebrar el fin del semestre en la casa de Paul (vaya que no me equivoque) —vamos —así quizá te distraes un poco y votas toda esa mala vibra que cargas —agrega con un poco de gracia

—Aun falta para el viernes —replico —y no, no necesito fiestas, ni mucho menos estar rodeada de un montón de personas, solamente no amanecí con ánimos y ya —digo casi en gritos (realmente solo quiero ver a aquel chico lindo)

—Ya paren, Abi deja a Sofi tranquila —dice Taylor —y bueno vamos a clases, ya es hora.

Luego de una larga y agobiante jornada en el instituto (si no es porque en mi familia hasta el perro se graduó, ya me hubiera retirado) salgo hasta el estacionamiento después de despedirme de Abi y Taylor

—abro la puerta del coche y tiro mi mochila hasta atrás (casi que la golpeo del vidrio trasero) entro y me detengo un rato mientras respiro profundo —¿Qué es lo que me sucede) —me pregunto —¿Acaso es que me enamoré de ese chico? —digo mientras meneo la cabeza —no seas tan tonta Sofía relájate —me digo —esto no puede ponerme tan mal

Enciendo el motor del auto y lo pongo en marcha —salgo a toda prisa, mientras veo a mis compañeros reunidos en la parada del bus.

«—¿Esa no es Sofi? —le dice Abi a Taylor —si —él responde —realmente no se qué rayos le sucede hoy me tiene muy preocupado, ella tiene sus días (claro como toda mujer) pero tampoco tan así, esto no es normal Abi —termina Taylor»

Mientras yo conduzco por la autopista rumbo al centro de la ciudad —de verdad que necesito un poco de calma —digo —cojo rumbo con dirección al 19 café bar —aunque no debería —me digo —¿Qué consigues con esto Sofía? ¿Quieres verlo? (es claramente obvio) ¿Y si está con otra chica?, no sabes si tiene pareja ¿Cómo te vas a enamorar de un desconocido? Su charla no duró ni diez minutos —termino mi conflicto interno y me terminó dando cuenta de que estoy obsesionada con ese chico y realmente no sé por qué, si solo cruzamos un par de palabras y ya, más nada

Llego al café y dirijo a camino hacia donde siempre me siento, en el mismo lugar de siempre (donde lo conocí) y para suerte la mía (aunque no era lo que quería) no estaba

Me siento y le hago una seña a Endrick (de todos los mesoneros es el único que me cae) —Dígame señorita —dice el —el de siempre por favor

—¿Puedo hacerle una pregunta? (bueno realmente otra) —añade Endrick —Si Endrick ¿Qué sucede?

—eso me pregunto yo —responde el —¿Qué le sucede? No es la misma chica de la sonrisa bonita ¿Qué le pasa? —Nada Endrick, dormí mal, el día en el instituto fue agobiante —le respondo —así que por favor —Vale señorita, disculpe —responde

¿Realmente se me nota lo pesada que ando? ¿Ya no puedo estar así?

Todos se han dado cuenta de lo mal que ando —pero, seguramente es por el cansancio, y por la molestia que agarre esta mañana con mamá por levantarme tan temprano, mañana amanezca tranquila —si seguro

Luego de beber mi café, me quedo sentada frente al vidriar observando caer el sol (por eso es mi lugar favorito) «este café queda ubicado en una zona semi-montañosa de la ciudad por eso es que en las tardes se ve el crepúsculo súper hermoso» —me trae un poco de calma (o bueno mucha calma) y me relajo hasta volver a mí —creo que tengo una disculpa que ofrecer (a pesar de la actitud arrogante de Abi desde que somos amigas nunca la había tratado así como la trate hoy)

—Cojo mi celular y le envío un SMS

«Abi ¿Dónde estás?

—Aquí en la plazoleta cerca del instituto, donde siempre que me dejas botada me quedo ¿Por qué?

—Ok’ok ya te llego— fue el último SMS»

Tiro el celular en el asiento del copiloto —mientras coloco una música —en inicio mi marcha hacia la plazoleta

Llegue a la plazoleta y empiezo a buscar con la vista a Abi porque aún no la ubico —hasta que logré encontrarla entre los que pasan (son las 5:40 de la tarde, y a estas horas está zona es muy concurrida por deportistas y todo tipo de personas que salen a tomar aire)

Me acerco poco a poco a ella —con mi cara de vergüenza —pero no le digo ni una palabra —oye que te sucedía está mañana —es ella quien empieza —solo estaba un poco agotada Abi —digo

De verdad discúlpame, no tenía que haber actuado de esa manera, y mucho menos contigo amiga —continuo —en realidad no sabía que era realmente lo que me sucedía y en ese momento creo que estaba un poco molesta, se que no debí actuar así, pero créeme no era yo —termino de decirle con los nudo en la garganta —Tranquila Sofía te entiendo perfectamente, es primera vez que te pones así ¿Pasa algo más que me puedas contar? —No es solo eso —miento (obvio que sucede más, pero no le voy a contar nada de eso)

Bueno Sofi, solo debes de calmarte —agrega ella —¿Me perdonas? —le pregunto —obvio que sí —dice mientras sonríe y me abraza —no voy a dejar a mi amiga del alma a un lado por un malentendido —agrega

—¿Qué haremos entonces el viernes? —pregunto —porque tengo que ir alistando el outfit —¿Irás a la fiesta? —pregunta —obvio que vamos —le digo casi en grititos —ya iba decir yo que en unos días dejarías el plano terrenal si no llegabas a ir —dice en forma de burla

—Los ánimos los cargaba por el suelo, pero claro que escuché el día y el lugar de la fiesta no voy a perdérmela —digo y suelto una carcajada

¿Te llevo a casa Abi? —pregunto mientras observo la hora en mi teléfono y noto que ya van a ser las 6:35 de la tarde —te lo agradecería bastante —responde —vamos.

Entro al estacionamiento y veo que está el auto de mi padre —al parecer llegó temprano, así que noche de cena familiar —apago el motor de mi auto, quito mi cinturón mientras con el otro brazo cojo mi mochila y procedo a bajar del auto

Al entrar por la puerta de la cocina estaban mamá y papá ahí —mamá preparando la cena —mientras que papá estaba sentado leyendo el Londres News

—llegaste hija —dice mamá —mientras papá se levantó y puso su periódico a un lado, me rodea con sus brazos y me aprieta hacia el para darme un beso en la frente

—hija mía, mi gran orgullo —dice papá —mi futura contadora pública —agregó con una sonrisa (si el supiera que lo hago por obligación y no porque me gusta) —¿Cómo te fue en el instituto hoy? —pregunta

—bien —respondo —no andaba de ánimos, pero buen gracias a Dios. El profesor de contabilidad llegó hoy con un discurso de esos que dan sueño, pero bueno, tu sabes papá a que prestarle atención a todo —añadí

—y a ti papá ¿Cómo te fue hoy en esa reunión? —bien hija —respondió de inmediato (realmente siempre le va bien) era para pautar unos encuentros con unas empresas que están interesadas en nuestros servicios y pues sí todo sale como está coordinado te aseguro que lloverán las buenas noticias —me alegro mucho papá —digo mientras le regalo una sonrisa (mi padre es un hombre excepcional, el modelo de ejemplo a seguir, pasa que yo no lo quiero seguir)

—¿Ahora si estás de ánimos? —pregunta mamá desde su lugar —si mamá —respondí —pasa que tú me levantas muy, pero muy temprano, anoche me quedé dormida muy tarde organizando unas cosas del instituto y luego llegas tú y me levantas a las seis de la mañana ni que yo trabajara en una granja —refuto

—disculpa mi amor —dice dulcemente —es que tú también das muchas vueltas para arreglarte por eso te levanto a esa hora —agregó —que muchas vueltas mamá —digo —ni que fuese a una fiesta que tengo que maquillarme y peinarme muy bien (justo ahí recordé lo de la fiesta de fin de semestre en la casa de Paul, pero debo inventar una excusa perfecta para que me dejen ir y para que me den plática para mi outfit y si les digo que es del instituto no dirán que no) —mamá sabes que para ir para el instituto yo me arreglo rápido, es más —continuo —para eso papá me compró un auto, para no andar con esos apuros —si hija —me interrumpe —lo se —y tú siempre me preparas el desayuno, yo me levanto a las 7 me arreglo y a las 7:50 ya voy saliendo —digo —así que mamá por favor, ten un poco de consideración ¿Sí? Sé que quieres lo mejor para mí, pero por favor.

—vale hija mía, está bien disculpa, solo lo hago para que no llegues tarde al instituto, pero ya te dejaré dormir un rato más, de todos modos ya vas a estar de vacaciones —agregó

—ya basta de peleas —dice papá —hoy es noche de cena familiar cálmense —mamá se acerca y me da un beso en la cabeza —te amo hija

—bueno me voy a duchar mientras mamá termina de hacer la cena y bajo ¿Vale? —digo —no tardes mucho que se enfría —responde papá —y antes de que se vaya a enfriar mejor yo le hago el favor —añade mientras se acaricia la panza y ríe —ni en sueños papá —respondo y subo rápido

En lo que estamos terminando de cenar me atrevo a decirles lo de la fiesta

¿Saben que el viernes es la fiesta del fin de semestre del instituto verdad? —No, no sabíamos —dice papá —yo escuché algo en el club de padres y representantes (claro como el instituto “WONDER” es de alta “envergadura” donde asisten los niños de bien, y los que lo hacen por obligación como yo, tienen un club de padres y representantes para monitorear a sus estudiantes) pero no han dicho nada más —agrega mamá

—Pues si, es el viernes —completo —y quiero pedirles algo —¿Qué será? —dice papá —mientras mamá se queda observándome de manera expectante

—necesito dinero para comprarme el outfit por favor —suelto en forma de súplica, casi que se me ponen los ojos como a los personajes de las comiquitas

—pero con una condición —responde papá —no es que vas a comprar algo indecente hija, recuerda que es un instituto de clase por favor —dice —y no es que vas a gastar un montón de dinero Sofía —añade mamá —recuerda que es una fiesta solamente y tienes cosas más importantes en que gastar

Me levanto llena de alegría y me incorporo entre los dos para abrazarlos y darle un beso a ambos

—por eso es que los amo —digo —nosotros también te amamos hija —respondió mamá

(Y ahí está una de las ventajas de ser la única hija)

Subo a mi habitación pongo música suave mientras lavo mis dientes y me coloco una pijama (para poder dormir tengo que siempre escuchar algo de música) y me adentro en mi cama

—Abi ¿Estás? —le envío un SMS a mi amiga

—si cuéntamelo todo y exagéramelo —responde ella siempre con su sed de chismear

—te escribo para decirte que ya es hora de dormir —respondí

—¿Y eso por qué? ¿Estás loca o que carajos te pasa? —responde en forma de reclamo

—Mañana vamos de shopping nena —le respondo y no pasa mucho tiempo cuando su respuesta llega

—¿Qué no te creo? —casi que escucho sus gritos aquí en casa —vale entonces descansa, ahora sí voy a dormir —agrega

—vale, mañana paso por ti

—esta bien, descansa Sofi —hasta mañana amiga —respondo

Abro la app de i*******m y lo primero que me aparece en el feed es una foto de aquel chico lindo junto a su hermanita (vaya que es linda) y su padre (sin duda son idénticos) y en el pie de la foto decía «“6 meses sin ustedes, pensé que fue toda una vida ¡Los amo!”» y para mi mayor sorpresa aún no ha visto mi DM —que decepción —digo —bueno quizá es porque tenía tiempo sin su familia y está conviviendo con ellos pronto llegará su mensaje —bueno eso espero

Bloqueo mi móvil y lo tiro a un lado para quedarme dormida.

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