Aquella mujer era retrasada, vulgar, viciosa y detestable.

Emily se recostó en la silla, entrecerró los ojos y dijo: -Parece que la señora Winston quiere recoger la cuenta por nosotros. De acuerdo entonces, dejaremos que nos invite una vez».

El camarero se enteró de que iban a pagar la cena y preparó rápidamente la cuenta. De hecho, no le gustaba una persona como Amy, pero le preocupaba aún más que los cuatro jóvenes no pudieran pagar la comida.

Después de todo, ¡era realmente cara!

Cuando el camarero oyó a Emily, se dirigió hacia Amy con la cuenta.

Amy se sonrojó y dijo: «Lo siento, no llevo dinero.

No pasa nada, puedes pasar la tarjeta. ¿Quién lleva dinero en efectivo hoy en día?». dijo Emily riendo.

Sally también se rió a carcajadas y añadió: ˇDigo yo, Sra. Winston, ¿será que no puede permitirse invitarnos a comer?».

Joe también añadió: ˆYa que no puede permitirse invitarnos a esta comida, entonces no presuma ante nosotros ni nos haga creer que es tan generosa. ˆ

Aunque Terry no di