Lombardo, no descansaba en su búsqueda con estella, lo que ellos habían vivido no se podía quedar así sin que le diera una explicación, él la amaba, ella lo amaba a él, ¿por qué demonios iba a casarse con el imbécil de Nathaniel Castrioli El CEO por fin dió con la dirección del lugar donde se encontraba su mujer, él estacionó su coche esperando con paciencia, sabía que la vería en algún momento y así fue, un auto llegó con ella, pronto se puso frente al vehículo— ¡Bájate, tenemos que hablar! — la órden del joven CEO fue concisa, Estella se puso pálida, no esperaba verlo ahí, ese hombre le iba a poner las cosas difíciles, la chica bajó y lo siguió a su auto— Lo sé todo, sé que vas a casarte con el mafioso Castrioli, ¿me gustaría saber qué carajos hacías conmigo si al final te ibas a quedar con él? — Lombardo, yo....— Habla, ¿dime por qué jugaste así conmigo? te dinlo mejor de mí, Estella, te amé, te hice mi mujer y ahora resulta que vas a casarte con otro a escondidas mías, ¿qué p
Nathan seguía en coma en aquella cama de hospital, sus padres Nathanael y Vanessa, estaban siempre pendientes de él y de sus pequeños avances, no había regresado aún pero todavía tenían muchas esperanzasA Eleanor le había crecido la barriga, la ex agente visitaba todos los días al mafioso, ella le hablaba de su bebé, de cómo se sentía tenerlo en su barriga, de los muchos antojos que le provocaba y que Nathaniel, se encargaba de cumplir— Nathan, hay veces que verte aquí sin moverte, sin hablarme, sin que me beses, me sobrepasa, a veces he llegado a perder la esperanza por unos momentos pero viene Nathaniel, me abraza y me da los ánimos que necesito, te confieso que muchas de esas veces cierro los ojos y me imagino que eres tú el que me abraza — la bella agente cerró sus azules ojos ya dejó caer que sus lagrimas rodaran por sus mejillasMientras tanto, en la oficina de Alexander Black, Angela había estado ayudando a su hermano en el negocio, ella necesitaba ocuparse en algo para dejar
El mafioso estaba ahí de pie observando a la mujer que amaba y el bebé que llevaba en la barriga, tenía que ser mentira que ese bebé era de era de Lombardo, porque de ser así lo iba a matarAngela trataba de esquivar su mirada gris penetrante, sentía que le quería leer el alma, ver en su interior, ella trataba de ocultar todo lo que sentía por él, en realidad se la estaba poniendo difícil— ¿Entonces esa es tu última respuesta? ¿seguirás afirmando que el bebé es de Lombardo Maldonado? piensa bien lo que vas a decir — el hombre espero la respuesta — ¿Por qué te importa tanto? vas a casarte, ten tus propios hijos, se feliz con esa chica a la que le pusiste el anillo en el restaurante— ¿Cómo sabes que le puse el anillo de compromiso en el restaurante?— Por que yo estaba ahí, fuí yo quien te citó en ese restaurante, solo que le pedí a Alexander que lo hiciera por mí, pero fue un error que ya pasó, no te interrumpí entonces, tampoco te interrumpiré hoy, veré y que seas feliz en tu próxi
— ¡Eres un imbécil, Nathaniel! ¿cómo se te ocurre asustar así a una mujer embarazada? ¡eres una bestia! dame a Angela para llevarla al hospital, espero que el bebé esté bien, no creo que ella pudiera soportar otra pérdida— No se te ocurra querer quitarmela, yo la llevaré a la clínica, Angy, perdóname, no pensé bien las cosas, los celos me cegaron, solo podía pensar en matar a Lombardo por haberte embarazo, no podía haberme quitado lo que yo más deseo en este mundo, a ti y aún hijo nuestro... Maldonado, ¡¿por qué no me dijiste que el hijo de Angela no era tuyo?! — Por que quería verte sufrir, eso es obvio, tú me quitas a la mujer que amo, pues yo te quito a tu bebé, así estamos más parejos, ¿no lo creés? ¿por que sólamente el miserable voy a ser yo? si aquí no es feliz uno que no lo sea nadie— ¡Idiota!! no te doy más por qué me tengo ir con Angela, pero esperate a qué te vuelva a encontrar— Ya sabes cuando quieras, seguiré en el mismo lugar de siempre, romperte la cara definitivame
Nathaniel tenía una sonrisa amplia en el atractivo rostro, un varoncito, uno de sus más grandes deseos se estaba haciendo realidadAngela lloraba emocionada, deseaba a su bebé con todas las fuerzas de su corazón, lo amaba, el ver a Nathaniel tan contento con la noticia la ponía dichosa, aunque no podía olvidar que él estaba ahora comprometido y que pronto se casaría con la chica del restaurante— ¡Es un boy, Angela, un varoncito, más de cuatro meses y nos me habías dicho de su existencia, ¿cómo te justificas por eso? soy su padre, tenía derecho de saber!— Quise decirte, pero estabas ocupado comprometiéndote con una bella chica, monte quise interrumpir, ahora nuestras vidas tomaron caminos diferentes, tu vas a casarte y yo... yo seguiré mi camino — Angela se puso de pie, ella ya quería irse para regresar a la oficina— ¿Qué quieres decir? ¿cuál camino? ¿vas a insistir en casarte con Lombardo Maldonado? ¡responde! — Nathaniel, no hagas las cosas más difíciles, ¿qué pretendes? ¿qué sea
Nathaniel se encontraba frente al imponente CEO Lucien Black, él lo miraba fijamente mientras lo escuchaba— CEO Black, entre Angela y yo ha habido muchos malos entendidos, ella se fue pensando que no podría tener hijos, no quería atarme a una relación donde no pudiera darme herederos, cosa que me enfureció, yo la amo y eso no me habría importado, hubiese seguido a su lado hasta el final de mis días, amándola de la misma forma en la que lo hago ahora— Entiéndeme, no podía atarte a mí, a una vida donde siempre estarías deseando conocer tu sangre, fue por eso que me fuí, pero al poco tiempo descubrí que había quedado embarazada justo cuando iba a comenzar a hacerme estudios de fertilidad, deseaba poder encontrar una posibilidad de poder darte un hijo, mientras no iba a volver— Mujercita tonta, no me habría importado no tener hijos si tu estabas a mi lado, cuando te fuiste... quedé devastado, casi muerto por tu culpa, ¿quisiera saber cómo me vas a compensar ese mal momento?— ¡Yo... le
Después de sentir a su bebé patear, el joven mafioso entró al restaurante sin perder de vista a la madre de su hijo, vió que ella seguía en llamada, fue entonces que se encontró con Estella, ella ya lo esperaba en la mesa de aquel lujoso restaurante— Estella...— Nathaniel, que bien que pudiste venir, hay cosas de las que quiero hablar contigo, Estella llevaba un abrigo que le cubría el vientre, ya no podía ocultar más su embarazo— Aquí estoy y aunque también tengo algo importante para decir, habla tu primero, tu me citaste, no te preocupes que sea lo que sea lo voy a entender— Bueno... lo que tengo que decirte no es fácil, en este momento estamos comprometidos, pero antes de que mi padre me pidiera casarme con uno de los gemelos Castrioli, yo conocí a un hombre del cual me enamore, una cosa llevó a la otra y... yo... estoy embarazada — la bella italiana se puso de pie, se descubrió el abrigo y le mostró su vientre hinchado al mafioso— Nathaniel estaba sorprendido por la inesperad
El joven mafioso regresaba en su lujoso auto con la bella joven Black, ella se tocaba la pancita, Nathaniel manejaba molesto, Estella lo había abofeteado, Su mujer lo había abofeteado pensando que había embarazado a la chica italiana y para colmo, Lombardo que se le fue a los golpes— ¡Nadie... nadie en el país o incluso en el mundo se había atrevido a tocarme la cara, ahora parezco peleador de box, hasta tu me levantaste la mano, si no fuera por qué estás embarazada de mi bebé, te castigo, Angela!— ¿Serías capaz de castigarme así embarazada? pero qué duro corazón tienes, Nathaniel, yo que todo lo que hago es amarte y tu pensando en hacerme sabrá Dios que cosas— Que está vez te valga que llevas a mi bebé en el vientre, por qué si me vuelves a tocar y no estás de embarazo, no te dejo salir de la habitación por un mes completoAngela podía ver qué el mafioso no estaba jugando, él hablaba muy en serio, Nathaniel era un hombre arrogante, no permitía que le faltarán al respeto, su dignid