Al cabo de un rato, Thea sintió que una energía cálida y agradable se extendía por todo su cuerpo. El calor parecía proceder de los puntos donde James había colocado las agujas.

James insertó cuidadosamente agujas infundidas de energía en su cuerpo.

En un instante, ya había siete colocadas en varios lugares del cuerpo de Thea.

Después de las ocho agujas, su Energía Verdadera estaba casi agotada.

Con esta técnica, una parte del veneno del cuerpo de Thea había sido expulsado con éxito.

Sin embargo, el uso del Crucificador de esta forma tenía un límite. Por lo tanto, James no podía eliminar por completo todo el veneno del cuerpo de Thea.

“Espera un poco, Thea. Iré a buscar unas agujas de acupuntura”.

“De acuerdo”.

Thea estaba acostada en el sofá.

Se sentía mucho mejor y aliviada de que no iba a morir.

James se apresuró a buscar unas agujas de acupuntura y volvió a la habitación con la misma rapidez. Entonces, cerró la puerta y empezó a utilizar agujas de acupuntura para expulsar