Louis comprendió la situación que se avecinaba.

James no dijo mucho, ni se quedó en aquel lugar. Desapareció sin dejar rastro.

Tampoco buscó a Jethro ni a Leilani, sino que se marchó en silencio, sin hacer ruido.

Ninguno de los Ángeles se enteró de su marcha, excepto Louis.

James era consciente de que su aparición entre los Ángeles sin duda sería notada por la Destrucción, ya que se había revelado abiertamente.

Su próximo destino era la base de la Secta Erradicadora del Cielo, donde debía asumir una nueva identidad y volver a ser el verdadero James.

La sonrisa de Louis se desvaneció tras la marcha de James, y su expresión se volvió gradualmente solemne.

"Tal vez debería dejar de lado mi arrepentimiento interior. El futuro de los Reinos Mayores será muy turbulento, con los humanos y la Destrucción compitiendo por el dominio, lo que afectará a todas las razas", murmuró Louis en voz baja.

Como figura de alto rango entre los Ángeles, Louis tenía el estatus de Gran Patriarca, p