James había predicho que Crucificador invocaría la ira kármica.

Un Crucificador ya existía en esta Era Primigenia. El que James poseía era del futuro.

El Poder del Karma hizo que las heridas del Camino Celestial en su cuerpo se abrieran de nuevo. James sintió un dolor atroz en todo el cuerpo. Tenía la cara distorsionada por el dolor y la frente empapada en sudor.

"¿Heridas del Camino Celestial?".

Las tres personas presentes se sobresaltaron al percibir las heridas en el cuerpo de James.

Las hermanas eran Dioses Ancestrales y estaban muy familiarizadas con las heridas causadas por el Camino Celestial.

Se las consideraba las más poderosas de su grado. Además, ya no estaban sujetas al Camino Celestial. Sin embargo, no se atrevían a desafiar el Camino Celestial.

Hasta donde sabían, solo unas pocas personas podían causar daños utilizando el Poder del Camino Celestial.

Uno era un Dios Ancestral del Macrocosmos.

El segundo era Radomir, quien controlaba el Camino Celestial.

El tercer