El misterioso objeto que emitía rayos de luz de colores no era más que una estatua.

La estatua medía cincuenta metros de altura y tenía la imagen de un hombre vestido con una túnica. La estatua tenía una expresión concentrada mientras miraba a lo lejos. Tenía un carisma invencible, como si despreciara el mundo.

Aunque era una estatua, emanaba una fuerte energía.

Había un aire de poder alrededor de la estatua, como si fuera un verdadero artista marcial.

James se sintió abrumado por su energía y sintió el impulso de adorarla.

“¿Eh?”. James estaba atónito.

¿En honor a quién estaba esculpida la estatua? ¿Cómo era posible que tuviera una energía tan fuerte?

Tyrus también se sobresaltó.

Pensó que había aparecido un ser divino. Nunca esperó que fuera una estatua.

“¿Quién está ahí?”.

Una fuerte voz resonó por toda la zona.

“Vamos”.

Tyrus reaccionó al instante e instó a James a marcharse.

James no perdió más el tiempo y rápidamente se dio la vuelta para huir.

En ese momento, una f