Maxine habló débilmente: “Estoy bien... Tengo que ir a los cuarteles generales y organizar una reunión para anunciar la retirada de los Caden de Comercio Oriente, así como la participación de Comercio Nueva Era de James”.

“¿En el estado en el que estás?”. Bennett frunció las cejas.

“S-Solo envia algunas personas conmigo…”.

“Creo que debería llevarte personalmente”, dijo Bennett.

¿Cómo iba a estar tranquilo permitiendo que Maxine fuera sola en el estado en que se encontraba?

Antes de que Maxine se dirigiera al cuartel general, James ya se había reunido con Quincy.

Quincy iba vestida con un traje de negocios rojo y un par de zapatos de tacón rojos. Incluso su cabello ondulado estaba teñido de rojo. Parecía gustarle el color.

“James”, lo saludó ella con dulzura mientras subía al coche.

“A casa de los Sullivan”, le ordenó James al conductor.

Entonces, miró a Quincy y le preguntó: “¿Cuál es la situación con Comercio Nueva Era?”.

“Nada mal”, respondió Quincy. “Desde que n