Fuera de la Mansión del Emperador...

Se acercaba un vehículo militar.

James salió del mismo y los guardias en la entrada saludaron simultáneamente. Él les dio un pequeño saludo con la mano antes de caminar directamente a la mansión.

Maxine y Thea estaban sentadas en el patio.

Su relación parecía haber mejorado en los últimos días. Estaban charlando sin ser frías la una con la otra.

Estaban muy preocupadas hoy. Les preocupaba que las cosas se salieran de control del lado de James. Afortunadamente, no hubo contratiempos.

“James”.

“Cariño”.

Cuando James se acercó, ambas se pusieron de pie al mismo tiempo.

James se acercó y se sentó en una silla del cenador. “Thea, ¿terminaste todos los preparativos para Cansington?”, preguntó él.

“Sí”. Thea asintió y dijo: “Ya he dado órdenes a las élites del Palacio del Dios-Rey para que brinden su protección de manera encubierta”.

“Bien”. James dejó escapar un suspiro de alivio.

“¿Qué planeas hacer ahora?”, preguntó Maxine.

“Primero, montar