¡Darryl había explicado innumerables veces que no sabía lo que le había pasado a la Madre Abadesa Serendipia ni le había hecho daño! Sin embargo, ¡Aurora seguía negándose a creerle!

Darryl mostró una reacción indiferente cuando ese pensamiento cruzó su mente y sonrió a Aurora antes de decir: "Claro, te entretendré cuando quieras devolverme el favor, pero tendrás que ponerte algo tan atractivo como hoy. Si no, no tendré ningún interés en luchar contra ti".

Aunque en el fondo estaba furioso, Darryl no pudo evitar burlarse de ella.

"¡Tú!". Aurora apretó los dientes y sintió ganas de matar a Darryl en el acto, pero se contuvo.

Las otras sectas estaban mirando. Además, Darryl se había convertido en su Maestro de Alianza. Pensando en ello, no sería prudente actuar aquí. Entonces apretó los dientes en silencio y dirigió a sus discípulos para que se marcharan.

El ambiente se relajó un poco tras la marcha de Aurora.

El maestro de secta Sin Fin se acercó a Darryl en ese momento y sonrió: "