Dalton asintió con la cabeza, sus ojos nunca abandonaron el cuerpo de Monica.

Dalton sonrió y preguntó: "Gerenta Janette, escuché que esta hermosa dama solo serviría frutas y cantaría. ¿Haría una excepción y tomaría una copa conmigo?".

Janette estaba atónita, pero sonrió y dijo: "Presidente Dalton, usted es un invitado especial aquí. Por supuesto que podría hacer una excepción. Es un honor para Mónica tomar una copa con usted".

Mientras hablaba, miró a Monica y le pidió que le sirviera una bebida a Dalton.

Monica se mordió los labios y dijo: "Gerenta Janette, hemos acordado que no tendré que beber con los invitados".

El primer día de trabajo, Monica sintió que algo no andaba bien. Los invitados siempre la miraban como si estuviera desnuda. Todas sus miradas la hacían sentir incómoda.

Mónica quería irse del lugar, pero ¿adónde más podía ir?

La Ciudad Mar del Stei era tan grande y no tenía dinero con ella. ¿Dónde encontraría a Darryl?

La cuñada de Darryl había recomendado ese lug