El edificio era antiguo y no contaba con ascensor. Caminaron hasta el segundo piso cuando Jay se detuvo y le dijo a la Señora de Secta: "Mi hermosa dama, aquí es donde vive Darryl, vaya y toque la puerta".

Monica caminó hacia la puerta.

Justo en ese momento, Jay sonrió y le arrebató el bolso cuando Monica no estaba prestando atención. Luego se dio la vuelta y empezó a correr.

“Tú…”, gritó Monica. No esperaba que él le arrebatara el bolso. ¿Acaso no era amigo de Darryl? ¡Qué vergüenza!

Monica había vivido en la Isla Elíseo como Señora de Secta durante bastante tiempo. Antes de eso ella nunca había sido engañada.

Cuando recuperó sus sentidos, Jay no estaba a la vista.

Monica se mordió los labios; estaba furiosa, pero no lo siguió. Aunque el bolso era valioso, no necesitaba el dinero ya que había encontrado a Darryl.

Luego ella llamó dos veces a la puerta.

La Señora del Culto estaba tan emocionada mientras esperaba a que Darryl abriera la puerta.

Pronto, la puerta se abrió. Una d