El Inmortal de Jade se acarició la barba mientras negaba con la cabeza. “Por supuesto que he estado aquí, pero eso fue hace miles de años. Los Nueve Continentes estaban bastante desiertos en ese entonces durante la era de las tribus. La gente se mataba entre sí y el vino aún no existía, y mucho menos estas delicias”.

Darryl asintió al enterarse y dijo riéndose: “Parece que rara vez nos visitas. Menos mal que ahora tengo todo el tiempo del mundo. Prometo traerlo para que pruebe las diferentes culturas aquí”.

“Seguro, seguro…”.

El Inmortal de Jade estaba extasiada, riendo contento con Darryl.

Momentos después, un puñado de personas entró al restaurante y se sentó a poca distancia de ellos. Esas personas obviamente estaban con la comunidad de cultivadores, ya que todos portaban armas.

Cuando se sentaron, comenzaron a charlar audiblemente.

“¿Ya oyeron? ¡La Alianza Celestial y la familia Carter han comenzado una guerra entre ellos!”.

“Ya nos enteramos de eso. Dijeron que terminó con