Kingston se rio con orgullo después de escuchar la evaluación de Matt por la pintura.

¡Había elegido correctamente! Matt había aclarado todas las dudas de Kingston en su análisis. Ese era el estándar de un aprendiz de maestro de tasación de antigüedades de renombre internacional.

Además de eso, Matt se veía realmente guapo. ¡Qué pareja tan perfecta con su hija!

Yvonne también asintió con la cabeza.

El talento de Matt para la tasación de antigüedades era realmente impresionante.

El vendedor de antigüedades, Austin, le dio a Matt un pulgar hacia arriba. "¡Parece que eres un profesional, Señor! Analizaste el cuadro con tanta facilidad, pero con claridad".

Matt sonrió con orgullo pero no respondió. Como aprendiz de un famoso maestro de tasación de antigüedades, se había acostumbrado a toda la atención y cumplidos.

Kingston se rio alegremente y dijo: "¡Muy bien entonces, Austin, lo compraré!".

¡Mil millones de dólares! A pesar de que necesitaba gastar toda su fortuna, todavía sentía