“¿Dax Sanders?”. Lily estaba sorprendida al ver a Dax caminar con normalidad.

‘¿Él no fue apuñalado y cortado con unas treinta cuchillas? ¿Por qué parece estar bien?’, pensó Lily mientras se mordía los labios.

“Dax, lo siento mucho por la otra noche…”, murmuró ella.

Antes de dejarla terminar, Dax se rio y lo echó para un lado. “Eso no fue nada. Darryl es como mi hermano, así que, por supuesto, intervendría de inmediato cuando te vea en peligro. ¡Jaja!”.

La risa de Dax instantáneamente hizo que toda la escena pareciera menos incómoda.

Lily sonrió y miró a Darryl. Vio que Darryl no le respondió y comenzó a entrar en pánico.

“Darryl, por favor, no te enojes conmigo. Lo siento mucho, realmente lo siento”, suplicó Lily mientras se mordía los labios.

Darryl respiró hondo, su rostro seguía sin emociones. No, no estaba fingiendo estar enojado con ella; en realidad todavía estaba enojado. Toda su vida, siempre había querido un mejor amigo de confianza. Solía ​​tener muchos amigos cuan