“¡Señor Kenny!”.

Denise recuperó lentamente sus sentidos justo en ese momento. Ella tomó unas cuantas respiraciones profundas antes de volver a caminar mientras sus lágrimas seguían cayendo. “Señor Kenny, ¿cómo pudiste estrangularme hasta quedar media muerta por Monica Vaughn? ¡Yo soy tu esposa! Monica hizo cosas tan inmorales y avergonzó a toda nuestra familia. ¡Es el deseo del pueblo que la cuelgue! ¿Por qué la sigues protegiendo? ¡No te obedeceré incluso si me matas hoy!”.

“¿Quieres morir? Cumpliré tu deseo”. En ese instante, el Señor Kenny se dio la vuelta lentamente con los ojos enrojecidos y caminó lentamente hacia Denise con su largo sable en su mano. ¡Él estaba lleno de un aura asesina en ese momento!

“Señor Kenny…”.

Denise tembló en silencio al ver sus ojos aterradores. ¡Ella no esperaba que el Señor Kenny tuviera realmente la intención de matarla!

“¡Señorita Denise!”. El Señor Kenny levantó su sable y se la colocó en el cuello antes de decir con frialdad: “Tengo claro qu