¡Sorpresa!
¿Adivina quién soy?
Lady Alexia.
No sé si debería decir que lo odio porque tengo entendido que odiar te envenena el alma y corazón. Aunque sinceramente me importa muy poco si tengo el corazón envenenado junto a mi insuperable alma, yo solo quiero justicia para mí y mis quinientas razones. Supongo que debería presentarme, pero no quiero ser pretenciosa, no como el imbécil rubio cabello pintado de otro color, que es un narcisista de primer mundo y que me ha besado sin mi consentimiento.
¡Sí, lo odio!
Actúe como si nada hubiera sucedido porque lamentablemente, vengo criada para soportar semejante idiotez… ya lo sé, estoy mintiendo. Obviamente me gustó el beso. El muy imbécil sabe besar. Odio el hecho de que sepa besar y me molesta muchísimo más, que mi cuerpo traicionero respondiera de buena manera. No he besado a nadie desde hace mucho tiempo y realmente había olvidado lo cálido y suave que pueden llegar a senti
¿Por qué lo hizo?Algunos días después…Giotto.Y me tomó por sorpresa todo lo que pude descubrir. Realmente no creí que ella fuera tan tonta. Nadie en sus completos cinco sentidos aceptaría semejante estupidez, pero cuando crees que nadie puede caer tan bajo, les llega la única persona que llevará la delantera por siglos… ella es la reina de Narnia.Increíble.De verdad le tenía mucha estima a la muchacha, solo que ahora con esto… ¿tanto ama al guardia? Que asco. El amor no te alimenta, te hace sufrir y te quita dignidad. En mi caso yo soy bien digno. Esas majaderías amorosas solo nos quitan dinero y tiempo. Realmente es algo muy valioso para mí y no lo voy a desperdiciar en una mujer que este conmigo solo por lo que tengo. Sinceramente estoy perfectamente proporcionado y soy increíble en todos los aspectos, además, le podemos incluir mi maravillosa cuenta bancaria.Así que solo estaré con una muj
La peor versión de mí.Al día siguiente…Giotto.Todos tenemos días buenos y no tan buenos. Durante el tiempo que he estado en la empresa, me hice enemigo de toda su directiva. A ninguno le gusta mi manera excepcional de trabajar. Soy implacable y mordaz.Simplemente no me gustan los errores.Mis empleados son unas pequeñas lucecitas que quieren encender bajo mi imponente sol y maravilloso esplendor. Con esto quiero decir que me cabrea la incompetencia de la clínica en la que está la reina de Narnia. Son lentos, tienen poco tacto y tuvieron las santas agallas de prohibirme la entrada, otra vez.No a cualquier mortal.A mí.A Giotto Marchetti.Estaba en la sala de espera como si eso fuera un procedimiento legal, cosa que me parece inhumano más bien. A una persona como yo no la pueden hacer esperar. El pasillo donde ella me encontraba est
Mi corazón me está traicionando.Departamento de Giotto.Lady Alexia.No podía creer que estuviera sucediendo nuevamente y mi cuerpo respondiera tan bien por lo que estaba pasando. Lo tenía aquí conmigo, frente a mí y me estaba besando otra vez. No lo sentía como si fuera el mismo arrogante imbécil de siempre y eso me preocupaba un poco porque no era Giotto. Estaba besando los labios más cálidos y suaves que pude haber imaginado alguna vez. Quería besarlo, abrazarlo y por alguna razón extraña, quería poseerlo y hacerlo mío.Sé que somos perros y gatos, pero en este momento solo somos él y yo. No hay arrogancia ni deseo de impresionarme. Solo hay un chico preocupado por mí y que desea recibir amor. Amor y no reproches. Un amor donde no lo juzguen y solo sea algo natural.Alguien muy similar a mí.—Giotto —hablo, en un intento de recobrar la cordura, pero él seguía dando pequeña
La fiera me odia.Minutos después de besarla.Giotto…Estaba completamente seguro de que había metido la pata, pero mi espectacular personalidad, no le interesa y realmente mi cerebro y yo, decimos que dimos lo mejor de nosotros mismos. Me refiero a que en caso de emergencia rompa el vidrio de la inteligencia extrema. Mi cerebro no funciona correctamente cuando se siente presionado o tal vez, como les explico para que no suene prepotente de mi parte.No quiero que crean que soy un hombre que piensa solamente en mí y que es superior a ustedes.Claro, encontré la palabra.Cuando siento que voy a perder algo sumamente importante por el momento, suelo tomar decisiones extremas.¿En este caso? Decir que me casaría con la mujer que estoy besando.O estaba besando.—¡Deja de hacer eso, imbécil! —me da una patada en mis perfecto
Varias semanas después…Valtioneuvoston linna- Finlandia.Lady Alexia.Habían pasado algunas semanas desde que Giotto habló con mi padre. Los preparativos de la boda estaban por finalizar y mi familia había decidido que la boda se haría en tres días. Sinceramente no quería que fuera así, pero debido a las circunstancias con Giotto, simplemente sucedió.Hemos estado viviendo juntos en el palacio y también hay una persona que nos ha estado vigilando para ver nuestra vida como pareja mientras estamos aquí. Hace unos días salió en la prensa nuestro compromiso y lo próximo de nuestra boda.Lady Alexia de Suecia por fin decidió dejar la rebeldía y sentar cabeza. La hermosa morena, después de muchos años de ser una molestia para su familia por sus actos poco convencionales, ha decidido casarse. El hombre que ha r
Un día antes de la boda.Valtioneuvoston linna- Finlandia.Giotto.Había conocido partes de la personalidad de Alexia y partes de mi personalidad que no conocía. Sinceramente con lo perfecto que soy podría resultar absurdo llegar a un acuerdo entre mi mente y lo que palpita en mi pecho que lleva el nombre de corazón. Siempre lo he dicho, amor con hambre no dura y lamentablemente no podemos promover la pobreza entre los individuos de la clase pobre y los ricos.Con esto trato de decir que yo no había aceptado a la indigna sirviente.Ella comenzó a contarme historias de Alexia siendo cruel y mala persona, pero he conocido a esa tonta princesa y la verdad, mala no es. Por culpa de un imbécil que en vez de ayudarla a superar su amor no correspondido, lo que hizo fue mantenerla en un eterno sufrimiento. Fue poco hombre y u
Medianoche...Día de la boda.Lady Alexia.Detengo el beso y decido alejarme de él, empiezo a caminar para irme de la habitación, pero detiene mi salida. miro a los ojos de Giotto.—Giotto, ¿lo dices en serio? Tienes todo lo que un hombre podría desear. Eres rico, eres guapo, podrías elegir a cualquier mujer que quisieras —me mira obvio.—Alexia, sé que podría tener lo que quisiera, pero eso me aburre. Quiero a alguien que no esté desesperado por mí. Quiero algo real. Lo digo en serio. Te quiero a ti —me intenta tranquilizar.Giotto me acerca, le levanta mi barbilla y vuelve a besar suavemente mis labios. Me derrite su tacto, me derretí en sus brazos, me invadió una sensación que nunca antes había sentido.—Giotto... —murmuro en voz baja.—¿Sí, mi princesita mimada? —res
Ámsterdan- Países Bajos.Dos años más tarde...Giotto.Puedo darte muchas razones para odiarme. La mayoría del tiempo eso es lo que suelo hacer sin problema, de hecho, me siento suficientemente impresionante cuando me odio, me estimo, me halago, me siento superior al resto cuando lo hago.Las ventajas de aceptarte como eres y cuando alguien, una persona que no es digna de merecer tu atención, aparece en tu vida para intentar minimizar tu magnífico ser, eso tómalo como una desventaja. No lo que te diga, eso claramente puedes ignorarlo y mandarlo a la basura, me refiero a la persona, a esa también la mandas a la basura, pero es una desventaja porque apareció en tu vida a malograr tu increíble e intachable paz.¿Deben presentarse el motivo de ese final tan abrupto? A veces la vida es así y yo no sería la excepción, no cu