ThorNunca pensé que el amor pudiera volver a uno tan tonto. Desde que descubrí mis sentimientos por esta chica todo en mi interior se ha desordenado. Como ahora, que debería estar bañado y listo para reunirme con mis hombres para revisar las finanzas, las bocas, los pagos de las mulas, los resultados de los cobradores... En fin, debería estar yendo a trabajar, pero sigo acostado en esta cama sólo observándola mientras duerme. Cabe decir que con un gesto tan simple, el corazón me salta como loco dentro del pecho y casi se me sale por la boca, y que por más que me repito que debo irme y que debo dejarla dormir, mi voluntad es despertarla y volver a tomarla para mí. Suspiro suavemente. ¿Cómo puede ser tan hermosa? ¿Y cómo puede conmoverme tanto sin hacer exactamente nada? Unos golpes en la puerta me despiertan y, con un suspiro frustrado, me obligo a salir lentamente de la cama para no despertarla, me pongo unos pantalones cortos y voy a abrirla. Sin embargo, me detengo a mitad de camin
Thor- Tenemos una orden para poner patas arriba esta hermosa y majestuosa casa suya. - Me tiende el papel.- ¿Qué coño es esto, quién ha hecho la puta denuncia?- El Sr. Gutemberg Massari te acusa de secuestrar a su esposa Iolanda Massari y mantenerla en custodia privada aquí mismo, en esta comunidad. - ¡Hijo de puta! ¿Involucró a la puta policía en esto? Cínicamente me doy la vuelta y abro los brazos con desdén, ofreciéndole las instalaciones de mi casa.- Pónganse cómodos, miren a su alrededor y verán que esta mujer no está conmigo. - De repente una base de diez hombres invade mi residencia y Nina me abraza temblando. - ¡Esperadme en el cuartel general! - ordeno a mis hombres, que llegan al salón segundos después.- ¿Qué vamos a hacer, Thor? - pregunta Nina en voz baja. Este comportamiento inseguro no me sorprende. Aunque Nina es una mujer extraordinariamente fuerte, todo esto es muy nuevo para ella. ¡Bienvenido a la corporación criminal mi vida!- Desayuna algo, ¡me muero de hambr
Nina - Thor y tú os habéis ido acercando estos días. - comenta Julia mientras recoge unas flores en el jardín. - Me alegro de que por fin el matrimonio funcione. - Me mira desconcertada.- No me siento firme con esa respuesta. ¿No irás a decirme que todo esto es una fachada, Nina?- Es peor que eso. - Suelta un leve suspiro y la acompaño hasta el siguiente parterre.- ¿Peor? ¿Por qué peor?- Tengo miedo de toda esta intensidad, ¿sabes? - Mi amigo espera que continúe. - A Thor le gusto mucho.- ¿Y qué hay de malo en eso? - Me encojo de hombros.- No sé, me siento... insegura al respecto. Quiero decir, está bueno, es atractivo, y está muy dedicado a complacerme. Pero por alguna razón no puedo sentir lo mismo que él siente por mí.- Sabes que no hay nada malo en eso, ¿verdad? Sólo lleváis juntos unos meses, aún os estáis conociendo. - Desanimado, me alejé un poco para sentarme en un banco de madera bajo un árbol y ella se sentó a mi lado.- Ayer me dio una sorpresa impresionante. Entré
Nina - Necesito tiempo para subir esto.- ¿Treinta días está bien para ti?- ¡Treinta días está bien!- ¡Eso es lo que me gusta de ti, mi reina! Y ahora, ¿quieres tomar una taza de té con tu súbdito?- ¡Claro que sí! - No sé si gritar, saltar o bailar. Mi segunda venta y esta es aún más extraordinaria. ¿Qué dirá Thor a eso? Si con veinticinco kilos me hizo ir al cielo, seguro que con esta venda conoceré el paraíso. Sólo de pensarlo me entra calor por dentro.- ¡Brindo por más tratos como éste! - Vasiky me despierta y nuestras copas tintinean.- Ha sido un placer, Maksym y no te preocupes, te buscaré para fijar una fecha de entrega.- ¡Estoy deseando que llegue, mi reina! *** - Vaya, ¿Thor te va a dejar salir así? - inquiere Julia invadiendo mi habitación y una amplia sonrisa se abre en mis labios ante este tonto comentario. ¿Por qué no lo haría? pienso audazmente, mirándome en el espejo de cuerpo entero. El atisbo del vestido negro corto, ceñido a mi cuerpo, pero con poca tela lleg
Thor ¿Qué harías si tuvieras que elegir entre el amor de tu vida y una venganza irreversible? Esta pregunta me consume desde hace horas. Por un lado, mi corazón anhela estar con ella para siempre y, por otro, mi conciencia me carga con mi deber como buen hijo y como narcotraficante. ¿Y por qué estoy así de dividido? El nombre de esta división es Gutemberg Massari.(...)- Creí haberte dicho que vinieras solo", digo en cuanto le veo entrar en la zona VIP con tres hombres detrás.- Seamos realistas, Thor, al igual que tú, soy un hombre muy perseguido y odiado por algunos. No puedo permitirme andar solo por ahí. Especialmente no en un lugar tan concurrido como este. Pero no te preocupes, no harán nada sin que yo les dé la orden.- En ese caso, no te importa que esperen fuera, ¿verdad? - A Massari no parece gustarle mucho mi sugerencia, sin embargo, hace un gesto ordenando a sus hombres que abandonen la sala. Le señalo uno de los sofás tapizados. Sin embargo, el hombre me mira seriamente
Thor - Necesitamos más tiempo para fabricar el maletín para este pedido, Nina. - Merci, dice preocupado nuestro fabricante.- Tenemos un plazo y tiene prisa. Si es necesario, aumente la plantilla. - Ella devuelve el golpe como un director general polivalente, haciéndome sentir orgulloso. Realmente ha cumplido lo que me prometió, se ha convertido en la mejor. Todo lo que mi padre me enseñó en años, veo que ella lo pone en práctica en días. Nina es muy trabajadora.- ¿Se lo has dicho? - pregunta Raven a mi lado. Niego con la cabeza y le digo que no. - ¿Cuándo piensas decírselo? - Cruzo los brazos, apoyándome en la pared sin apartar los ojos de ella.- Necesito algo de tiempo.- No tenemos mucho tiempo, Thor. Pronto Darlan sabrá que conocemos la verdad y eso le dará tiempo para armarse contra nosotros -resoplo audiblemente-.- ¿Y crees que yo no lo sé? - gruño impaciente-.- Necesitamos saber si Nina estará de nuestro lado. - Él insiste.- ¿Qué dices, Thor? - pregunta Merci, poniendo fi
NinaLa familia Guerra no era precisamente una caja sindical. Tenía una jerarquía y no se podía romper por nada del mundo. En la cima estaba Pero Guerra, nuestro padre. Era el rey, tanto dentro como fuera de la casa. En segundo lugar estaba Darlan Guerra, aunque era sólo un niño, cuando mi padre no estaba presente era él quien dictaba lo que se debía o no hacer. En tercer lugar, Lolita Guerra, nuestra madre, y en cuanto a mí y mis hermanas menores, sólo teníamos obligaciones. Es decir, no teníamos derecho a discutir ni a decir que no y nuestra única misión era aprender a ser buenas esposas pero fieles a la familia. Y nuestros mejores momentos eran aquellos en los que podíamos ser niñas...- ¡Corre, Maya, corre! - grita Jude, corriendo a toda velocidad detrás de un árbol de tronco ancho mientras termino la cuenta. Abro los ojos y miro a mi alrededor en busca de las damiselas. Desde donde estoy puedo ver el balcón de la casa, donde papá mantiene una conversación seria con un niño de ape
Nina No era nada fácil concentrarme en mi trabajo, ya que mi mente estaba poblada de pensamientos que me inquietaban. En efecto, nunca antes había pensado en la muerte, más aún en una muerte recomendada, peor aún, la muerte de mi propio hermano. No soy una persona de sangre fría y confieso que estos pensamientos perturban mi mente. Sin embargo, existe Thor y no pretendo perderlo por mis miedos e inseguridades, pero desde luego no participaré en esto, ya es demasiado agotador tener que pensar que conspiré para que esto sucediera. Aproveché el día libre para revisar el libro de los antiguos compradores de Zafiro y también sus cuentas. La mujer era realmente impecable con su trabajo, lo que me hace preguntarme qué la llevaría por mal camino. Entre sus contactos, señalé con bolígrafo negro a dos o tres de su lista y me tomé la libertad de llamarlos. No podía ser de otra manera y para mi satisfacción conseguí concertar una cita con ellos para una posible propuesta de vuelta. Estoy seguro