Emily BerksHe pasado horas aquí, pero lo que sé es que debe ser aproximadamente media tarde, y ahora es que me falta tiempo. Las veces que ha venido Dylan, he pataleado, me he retorcido, y como consecuencia, me dio un puñetazo en las costillas que empeoró mi dolor en el brazo. Sé que si no me dan atención médica, se me infectarán las heridas.Escucho el maldito pitido del otro lado que me indica que tendré que volver a luchar porque viene el asqueroso de Dylan, pero me sorprendo al ver a mi padre, o creo que es él, en esta posición tan incómoda no puedo ver muy bien, y si me Esfuerzo mas, me dolerá el brazo aun mas.—Vaya, nena— si, su voz me confirma que si es el —Te ves fatal.—¿Qué haces aun aquí?— la verdad me sorprende —ya cubriste tu pago ¿No? Creo que ya es hora de que vuelvas a Chicago y me dejes en paz—¿Qué manera es esa de hablarle a tu padre, princesa?— sigue con el sarcasmo —No me he ido, porque debo esperar que el idiota de tu prometido, me abra las puertas y no quiera
Viktor VitalovRabia, eso es lo que me corre por las venas en estos momentos, ganas de matar a ese cabrón. No se por que me contuve, no tenia que mirar a Emiiy a los ojos, sabia que solo con eso, iba a parar, Leandro también lo supo y por eso lo usó en mi contra.¡Joder! Por suerte no había nadie allí para ver que mi debilidad se llama Emily Berks y que es un apellido prohibido para mi familia, que siente algo por quien no debía.—que bueno que la escuchaste— Leandro está a mi lado, viendo como la mansión scott se cae a pedazos por las llamas —Nos quedó el heredero para nosotros y para que pague hasta por los pecados de sus padres.Pero eso no eran mis planes, sino dejar que se muriera como lo hacen ahora sus padres.Después de dejar a Emily en el hospital bien custodeada y sedada para que no sintiera dolor por todo lo que le harían, sobretodo con su brazo, me vine para asegurarme de que no dejaran escapar a Dylan, el tiene que pagar por haber tocado a mi mujer—¿Como esta ella?— preg
Emily BerksMe despierto sintiendo algo caliente en mi mano, al voltear veo a Viktor con su mano en la mía y sonriendo—Que bueno que despertaste— miro alrededor agarrando mi cabeza por el mareo y noto que estoy en un hospital, hay una vía en mi brazo y en el otro un yeso—¿cuanto llevo aquí?— parece que han pasado solo unos minutos, aunque se que no es así, cuando siento mi boca seca y miro que mi hombre lleva una pequeña barba sin afeitar—unos tres días.—¡Joder!— me incorporo preocupada ¿Que paso con los Scott? ¿Donde está Leandro? ¿Por que llevo tanto aquí? Me llevo la mano a donde me duelen las costillasEl brazo de Viktor se envuelve en mi cintura desde atrás y me vuelve a acostar en la camilla—yo pedí que te sedaran, para que descansaras— pasa su pulgar por donde están mis ojeras —y ya no pareces mapache— se burla y trato de relajarme con eso —además, lo del brazo, iba a ser doloroso, y para que no sintieras nada, también lo mandé a hacer— me sirve un vaso con agua para lleva
Viktor No me gusta cuando las cosas se salen de control, tampoco cuando quieren venir a mandar en mi vida, y eso es lo que está pasando Ahora mismo con mi padre. Mandó a Koy a Utah, junto a Kira, ¡Joder! Si esa mujer es tan intensa, que es capaz de dañar mi relación con Emily, si eso es una. No tengo idea ni de como funciona eso. Cuando salgo de la habitación de Em, recibo la llamada de Kira preguntando donde estoy porque ella y Koy estaban fuera de mi departamento esperándome. Sabia que mi padre tomaría cartas en el asunto para no verme cerca de Emily, pero todo esto es su culpa, el fue quien me mandó a seducirla, solo que por idiota, caí con ella. Cuando entro en la habitación, solo puedo ver como la enfermera le quita todos los cables a Emily, me la quiero llevar rápido antes de que mi padre me rastree, le pido a Leandro que hable con sus contactos, para que nos preste un Jet, si me voy en el mio, igualmente sabrán donde iré, y me quiero perder unos días, dejando todo en manos
Emily Berks Después de haberme duchado y haber almorzado un poco, nos quedamos viendo películas, si, porque los obligué. Cuando lo propuse ambos se carcajearon en mi cara, creyendo que era una broma, pero cuando me vieron seria, se dejaron de reir y Comenzaron a refutar. Leandro Comenzó a caminar hacia la puerta y le jure que si se iba, le dejaría de hablar, por lo que solo bufó y puso mala cara, pero luego de eso, se sentó en el sillón frente a la Tv para que yo eligiera las películas —¿Qué haces?— le dije a Vik que se estaba yendo a la cama para acostarse y “Descansar” pero lo amenacé con no tener sexo cuando me recuperara. Lo que hizo fue reírse sin importarle que estuviera Leandro me dijo sin voltearse: —Sabes que si te beso el cuello, tu serás quien me ruegue para que te folle. —¡Viktor!— lo había reprendido haciendo que su risa creciera Más, y como se que lo que le gusta es avergonzarme hablando de esos temas delante de otros, pensé que también yo podía jugar sucio. —Adem
Capitulo 40PlayaEmily BerksLa llegada a Miami fue un poco larga, llegamos en la madrugada, no cenamos, pero con los bocadillos que nos ofrecieron en el Jet, fue mas que suficiente para quedar satisfecha.—Para como comes, no se como haces para tenerte delgada— Viktor me toma de la mano mientras salimos y tomamos un auto que supongo ya había planificado Leandro, porque el siempre estuvo conmigo, y nunca lo vi haciendo llamadas, o con el móvil. Solo que apenas llegamos, un hombre bajo de unos cincuenta años, de cabello oscuro, lo reconoció, le tendió unas llaves y nos fuimos.—Quizás es porque solía correr, aunque últimamente no lo he hecho.—¿Te gusta correr?— su pregunta suena en tono sorprendido que hasta me hace preguntarme si me debo ofender, y me mira como si me hubiera salido otra cabeza—Okeeey, no se si deba ofenderme por tu comentario, pero si, solía correr, esta cosita fea le gusta mantenerse en forma aunque coma como camionero— se rie y me pincha de lado haciéndome retorc
Capitulo 41ViktorLa brisa fresca da contra mi rostro y cierro los ojos recordando mi tierra, Dikson puede llegar a ser el lugar mas frío, pero es un lugar con playa y es muy hermoso. Recuerdo cuando estaba mas niño, y me iba con mi hermano mayor y con mi hermana, que siempre fue amiga de Kira, y a su vez esta venia con nosotros.Aun no sabíamos lo que nos esperaba en la Bratva, solo pensábamos en jugar, hasta que cumplí 6 años, creo que en la organización se considera que es la edad suficiente para comenzar con ciertas labores, y es por eso, que estamos muy bien preparados y nadie nos hace frente.Abro los ojos y miro a Emily que viene hacia mi con una toalla grande, una mochila y una pequeña cesta. Lleva un diminuto bikini de playa color amarillo, que la hace parecer un día de verano, su sonrisa gigante me hace saber lo feliz que está y de cierto modo me infla el pecho de orgullo. Aun me da rabia verla con el yeso, que por haberla lanzado al agua, está un poco desastroso, aunque la
Emily BerksSabia que tenia que despertar de este sueño en cualquier momento, todo estaba demasiado perfecto como para creer que se mantendría así.Veo como Viktor se va hacia la casa y el hombre que trajo el móvil se retira unos pasos de mi dándome privacidad, miro que la llamada sigue en linea y me llevo el móvil a la oreja—Hooola— saludo al que ahora considero mi amigo—¿Me has extrañado? Por favor dime que has sido un grano en el trasero para Viktor y que le has hecho pagar lo hijo de puta que es.Suelto una carcajada porque el es el único que me hace reír en momentos de tensión—En realidad si, me ha dicho que me quede en la cama supuestamente descansando, pero es lo que menos hago, termina haciéndome otra cosa— quiero reírme por contarle esto a el —y se que estoy abusando porque el calmante hace que casi no me duela nada, pero no quiero ir al médico.—Em, sabes que debes ir, esta vez debo reprenderte porque estas afectando tu salud, deben ver que tan afectada estás— suspira del