“Ella siguió molestándote hace un rato”, dije yo.

De repente, Zachary extendió su mano hacia mí y me acarició la cabeza.

Con una voz gentil, él explicó: “Ella está buscando a Lucas”.

Sorprendida, exclamé: “Pero, la forma en que actúa contigo…”.

“Ella es de las que les gusta bromear”, comentó Zachary.

Su comentario era justo, y era lo mismo que él pensaba. De hecho, él estaba al tanto de muchas cosas. Después de eso, agregó: “Ella nunca me había tratado con esa actitud antes. Probablemente está actuando así para provocarte. No tienes que preocuparte por ella. Si ella te lastima, puedes contactar a Lucas. Él se asegurará de que ella desaparezca por completo. A pesar de su actitud, solo le teme a Lucas”.

“Yo…”.

“Solo si es necesario, no te detendré. Bel, espero que tu corazón esté conmigo, pero nunca he pensado en impedirte hacer nada. Si no quieres contactarlo, puedes comunicarte con el Asistente Yair”.

Comunicarme con el Asistente Yair era lo mismo que comunicarme con Luca