— No tengo problema por eso, estoy en edad casadera desde hace... mucho tiempo, ahora tienes que comer, tu cuerpo sigue todavía bastante débil, no quiero que se me acuse de matarte de hambre tambiénEl Alfa levantó sin problema la espalda de Valentina y puso debajo unas almohadas para que quedara sentada pero sin hacer esfuerzo— Abre la boca — pidió el hombre que tenía el tenedor en la mano con un trozo de fruta— No, yo... puedo hacerlo sola— Que abras la boca, yo te voy a alimentar, no es una pregunta, ¿qué no dices que todo lo que te pasa es mi culpa? entonces déjame compensaré un pocoA Valentina no le quedó más remedio que obedecer al dominante hombre, probó cada bocado, estaba bastante hambrienta, cuando terminó el lobo retiró la bandeja y fijó su mirada en el punto que su luna mirabaElla veía por la ventana, había caído nieve y estaba la mayor parte cubierta de ella, el blanco paisaje parecía mágico, estaba tan hermoso ahí afuera que le provocaba salir a pasear por el jardín
Valentina se preguntaba por qué ese hombre tan intimidante estaba tan molesto por qué ella se iba a casar, ella no le debía fidelidad, ni tenía que evitar tener una relación solo por él, pero lo que si sabía era que en su corazón se estaba metiendo como un mar bravío y avasallante ese atractivo hombrePor la noche, después de terminar todos sus pendientes, el Alfa subió a su habitación, Valentina leía uno de los interesantes libros que él le envió con su nana Linet, era un libro escrito que nunca salió publicado, contenía información de tribus y clanes pasados que ciertas personas con mucho poder no querían que el mundo se enterara, supuso que le agradaría leerlo ya que era arqueologa, el Alfa poseía incontables reliquias como esa en su bibliotecaLa mujercita levantó la mirada al ver qué apenas entró el hombre a la habitación, fue quitándose pieza por pieza el traje gris que llevaba puesto, se quitó los zapatos y por último la camisa quedando solo en boxer— ¡¿Pero que haces?! ¿qué h
El Alfa , había lanzado su propuesta así sin más, ese era el gran defecto o quizás cualidad de Lizandro, era directo, no le gustaba andarse por las ramas, Valentina se sonrojó y escupió el jugo de naranja en el rostro del hombre, el lobo salto del sillón y se comenzó a limpiar el líquido helado— lo siento, lo siento, no fue mi intención, es que dices muchas cosas, no sé que pensar de ti, primero te pones celoso de que me fuera a casar y te sientes ofendido, después me reclamas por un vídeo que no debería ser de tu incumbencia y... ahora quieres que yo... crie bebés con una pareja, ¿me trajiste para casarme con alguien? — Valentina tenía sus avioletados ojos acuosos, ella sentía algo por ese hombre pero si él la había traído para alguien más entonces retomaría su intento de huir— Ahhh — Lizandro se tallo los ojos con dos dedos, movía la cabeza de un lado a otro en negación, su luna lo había malentendido de nuevo, traerla para entregársela a otro lobo, eso simplemente era lo más absurd
Los días pasaban y casa noche el Alfa y Valentina compartían la cama haciéndose así el vínculo más fuerte, en los ojos de Valentina solo estaban los ojos azul grisaseos de Lizandro, atrás había quedado lo que creyó sentir por Elías Sotomayor, el Alfa se había propuesto ganarse el corazón de su luna y lo había logradoValentina ya no había intentado escaparse, no estaba convencida de que secuestrarla hubiese sido la mejor forma de empezar un cortejo pero era lo que había, Lizandro no era el rey de la paciencia La pierna fue sanando de forma que a la joven arqueologa la sorprendió muchísimo, ella no sabía que el Alfa lamía sus heridas para que con su saliva se cuerpo se curara más rápido Esa mediodía el comedor estaba ya ocupado por los hermanos Masherano, los tres estaban impecablemente vestidos, cada quien era extremadamente apuesto a su manera, Valentina llegó a acompañarlos a la mesa, había enviado comprar a a una de las mucamas un traje de su profesiónElla vestía un shorts y una
El Alfa se levantó de la cama después de disfrutar de tener a su luna dormida en su pecho, trajo del baño una toalla para limpiarla, de paso él fue a tomar una ducha, mientras el agua corría por su marcado cuerpo, la sangre de su miembro se desvanecíaSu luna era virgen, la había hecho mujer por primera vez, se había quitado de encima los agonizantes celos que sentía al imaginarla en los brazos de otro hombre, Valentina le había dado la noche más especial de toda su vida, ella no sabía la enorme satisfacción que le daba al lobo haber sido él quién le mostrara los placeres del sexo, ser él el primero en llevarla al clímax y acariciar todo su cuerpoA la mañana siguiente, Valentina se despertó al mediodía, la nana Linet tenía la orden de avisarle al alfa apenas su luna llamara o bajara a buscar comida, sabía que iba a estar hambrienta, además quería verla y saber que pensaba de la noche que habían tenidoEl frágil cuerpo de la bella joven, estaba bastante dolorido, ella buscó con la mir
Por la noche y ya muy noche, el Alfa por fin terminó su agotador trabajo, sus hermanos todavía seguirían un rato más, estaban moviendo toneladas de droga, los cargamentos eran muy importantes, no podían dejar nada al azar de hacerlo los pura sangre les arruinarían el negocioHabían recibido información de que los emboscarían si seguían la ruta que tenían trazada, pero Lizandro era mucho más astuto que esos perros del infierno, los logró burlar y la mercancía había llegado a tiempo con el compradorEl lobo subió a su habitación, está estaba en completa oscuridad pero él podía ver perfectamente, buscó a su luna con la mirada, ella lo esperaba sentada en la ventana, tenía los dos libros que él le dejó para que leyera en las manosLizandro no sabía que esperar, temía que lo rechazara, que lo despreciara por ser lo que era, que Valentina no entendiera su naturaleza — Hola, ¿cómo ha estado tu día? ¿qué tal la lectura? ¿te gustaron los libros? — el lobo se acercaba lentamente— Si, me gusta
A la mañana siguiente, Valentina despertaba con los rayos del sol, su largo cabello coloreaba la blanca almohada en un bello color chocolate, se dió cuenta que estaba desnuda, seguro Lizandro la había desnudó para que no durmiera incómoda, se fijó más abajo y vió que llevaba puestas sus bragas— No te hice nada, solo te desnudé para que durmieras mejor — el hombre iba saliendo del armario vestido en un traje hecho a medida, resaltaba en su muñeca un costoso reloj con el que se podría comprar por lo menos siete villas lujosas, se veía tan endiabladamente atractivo, tan elegante, como el más apuesto de los reyes que hayan existido en el mundoVanessa se sonrojó de pronto, evitó mirarlo a los ojos, se le vinieron los recuerdos de la plática que tuvieron por la noche, no podía evitar que a sus ojos él ya no fuera el mismo— ¿Te gusta lo que ves? me alegra, así es como debe ser, debo de gustarte y gustarte mucho, no puedes tener ojos para nadie más que no sea yo, ¿bajarás a desayunar? ¿po
Después del accidente de la mañana, el Alfa dejó que su luna descansara, sus hermanos estaban concentrados en lo suyo, moviendo cargas y entregando mercancía a los compradores, tenían desde sus sofisticadas computadoras ubicados casa uno de los envíos por GPS, nada podía perderse— Lizandro, ¿de verdad crees que lo que pasó con la loba está mañana fue un accidente? esa mujer no me da buena espina, no deberíamos quitarle los ojos de encima, ¿cómo se encuentra Valentina? ¿todavía tiene mucho dolor? — Many Masherano le advertía a su hermano de la loba Kara, y de que debían tener precaución— No sé si fue intencional, lo que si sé es que la quiero lejos de mi luna, Valentina estuvo llorando de dolor casi toda la mañana, ¿me preguntó cómo demonios le pasan tantas cosas bajo mi cuidado? estoy llegando a pensar que si no extremo medidas un día de estos me la matan— Ella es frágil Lizandro, debes estar más atento — Paolo Masherano le recalcaba a su hermanoLa llevaré a dar un paseo para que