“¿Amargo?”.

Forest se rio. “¿Soy yo el que quiere que sea así? Jessica, deberías saberlo mejor que nadie. Eres demasiado cruel. Después de regresar a Australia en ese entonces, ¿qué me prometiste? Dijiste que me dejarías pedirle tu mano a tus padres después de un tiempo. Pero, esperé y esperé. Al final, rompiste conmigo para luego casarte con otro hombre”.

“Eso no importa, ¿por qué cambiaste la medicina de mi hermana? Después de que quedó embarazada, incluso la amenazaste con los asuntos de la familia Lynch. No dejaste que abortara e hiciste que se casara con tu inútil hermano. ¿Cómo es posible que la familia Snow lastime y traicione a Freya? Ella siempre ha sido adorada en nuestra familia desde joven. La familia Snow destruyó todo”.

“Si tienes un poco de conciencia, o si tienes un poco de culpa hacia mí, no habrías lastimado a mi hermana de esa manera. Lo hecho, hecho está y no se puede dar marcha atrás, ¿lo sabías?”.

Jessica apretó las manos que estaban debajo de la manta. Su her