—Chicos— Advierto y tomo la mano de mi esposo— Nos vemos mañana hermanito descansa.

Tan solo lo escucho decidme lo mismo, pero no le prestó mucha atención, llegamos a la recámara y él cierra la puerta.

—No quise preocuparte.

Él no me deja hablar y me besa delicadamente, nos sentamos en la cama, él comienza a terminar su trabajo en la laptop, solo dejo que él haga ese trabajo por media hora y le quitó la laptop, él comienza hacerme cosquilla.

Estábamos jugando y le hacía cosquilla.

—Basta, por favor— Le ruego

—No— Niega rotundamente— Me gusta verte reír así que no.

—¿Qué quieres? Por dejar de hacerme cosquillas

—Hacerte el amor— Mis mejillas la siento caliente.

No dio nada en un rato para mí fue eterno, me muerdo el labio y lo observó directamente a los ojos, comienzo a quitarme la blusa.

—¿Qué haces?— Me pregunta confundido.

—Quitarme la ropa para hacer el