Capitulo 20 Mía

El único maldito momento que tengo de libertad y tranquilidad es cuando estoy con Camila, así que sea quien fuere el que se atrevió a arruinarlo esta en verdaderos problemas. Llegue al hall y me quede de piedra, hay dos hombres, o más específicamente. Los hombres que vinieron aquí el día en que Camila nació, parados en la entrada. La puerta está hecha añicos y Kimo esta frente a ellos, Luci está acurrucada en una esquina de la sala, su labio, aunque ya está sanando se ve roto.

- esto que acaban de hacer es invasión de domicilio imbéciles - les grité

  - yo que tú - comenzó a decir uno de ellos - me preocupaba menos por los problemas legales, y más por tu integridad física - sonreí de medio lado, estos tipos no me dan buena espina. No huelen a lobos y tampoco a humanos, no sé que demonios son y sé que nuestra protección en este momento es mínima.  La mayoría de los miembros están en sus trabajos, excepto Kimo y yo creo que solo esta Luci la niña