En la noche cuando Isabel, debió preparar la maleta de Alejandro tiene unas terribles ganas de llorar, recoger las cosas de su pequeño, olerlas y no saber cuál será la conclusión de aquella situación tan terrible la deprime, se traga el llanto.Su hijo es aún muy pequeño para entender las cosas, por momentos intenta calmarse y ser fuerte, pero a esa altura está agobiada con el hecho de separarse de su bebe de esa manera y por tanto tiempo, sin embargo, intenta infundirle al niño la idea de que todo estará bien, — Qué emoción, vas a pasar unos días con la abuelita para que te consienta mientras tienes el yeso, estoy segura que te cocinara cosas ricas, tal vez churros.— Yo quiero estar contigo mami, no con la abuela.— Pero si te encantan sus dulces, las tostadas especiales con figuritas y como estarás en cama te dará más gustos.— Por un día sí, no más mami.— Pero mamá va a trabajar muy fuerte estas semanas y como no puedes ir al colegio no tendrás quien te cuide.— Mi tía puede.— N
Una vez se hace mediodía su cuñado que parecía un niño emocionado por alguna sorpresa, lo primero que hizo cuando compartieron el carro fue detenerse en una farmacia, el dependiente pensaba que era para la hermosa pareja y les atendió conmovido de encontrar una pareja tan cercana que hasta compraran la prueba juntos.— Me disculpa que me involucre, pero es muy lindo que compartan hasta los más mínimos detalles juntos, con tanto modernismo ya las parejas no disfrutan tanto juntas — , Isabel sonrió y pensó que la señora a pesar de tener razón no podía estar más equivocada porque aquel que ella consideraba su pareja no era otro que su cuñado.— Vamos querida, no puedo esperar más a saber si vamos o no a tener un bebe — , y puso ojitos tiernos siguiéndole el juego a la señora que les había atendido, a Isabel no le quedó más que sonreír ante las locuras de su cuñado, sin duda su hermana y él eran tal para cual.— Está bien amor, entonces paga tu para poder irnos — , este sonrió ante las sa
Isabel, no había ido directo del juzgado por el niño, para permitir que tanto la abuela como el padre pudieran despedirse del niño, quería hacer las cosas lo menos traumáticas posibles para Alejandro pues en definitiva su hijo era muy pequeño para entender tantas cosas, cuando iba saliendo de la sala había recibido un mensaje de parte de Eduardo quien parecía estar un poco arrepentido por lo causado y la posibilidad de ser juzgado por manipulación de pruebas y ella había decidido darle la oportunidad de despedirse de la mejor manera pues si bien era cierto que no dejarían de verlo, no tendrían la oportunidad de relacionarse con el de la misma manera pues estarían bajo la supervisión de un trabajador social.Pero en cuento terminaron de almorzar le envió un mensaje para que supiera que se había terminado el tiempo e iría por él, se sentía tan emocionada que el corazón le palpitaba, Valeria y Jorge habían ido con ella y cuando apenas vio el carro detenerse se bajó de manera apresurada,
Esa noche Isabel se coloca un traje sencillo pero elegante y prepara a Alejandro para la ocasión especial, al llegar al lugar rápidamente uno de los meseros la lleva hasta el área reservada, ha sido la primera en llegar lo cual le resulta gracioso, el lugar está decorado hermosamente, la verdad su cuñado ha botado la casa por la venta, hay corazones, globos flores, todo muy romántico y hasta un poco cursi, pero estaba segura que a su hermana por muy dura que pretendiera ser aquel gesto le encantaría.Luego de unos minutos llegó Carlos acompañado de una hermosa mujer, Isabel de inmediato se incomodó, quería salir corriendo de allí, quizá era su nueva pareja, joven y elegante con un aire sofisticado y parecía ser agradable, él la miró directo a los ojos y se le secó la garganta, era tan hermosa, había perdido peso y se veía un poco demacrada pero aun así pasara él era increíblemente hermosa.— Isabel…, Alejandro, ¿Cómo estás?— ¡Carlos! — , grito extendiéndole los brazos y él le dio gus
Carlos no lo podía creer, había pasado de estar completamente triste y sentirse profundamente solo a estar comprometido y a ser posiblemente papa, entran al consultorio y la asistente se sorprende de ver a tantos acompañantes para una paciente, sin embargo, al ver el ánimo y cariño reinante decide dejarlos participar, mientras esperan el nivel de expectativas va en crecimiento, el único que se lo está tomando calma es Alejandro y debida a su corta edad.Luego de unos minutos es el turno de Isabel, la doctora luego de saludarlos a todos pregunta el motivo de la consulta y esta explica el par de resultados positivos en las pruebas caseras, así que le toma el peso y la presión arterial y pasan después de unas preguntas al área de ecografía, allí tal como ya conocer el procedimiento Isabel levanta un poco su camisa baja un poco el pantalón para descubrir su vientre y se acuesta serena.— ¿Qué es eso? — , preguntó el niño cuando vio a la doctora colocar el gel y el aparato apoyado sobre su
Aquella noche en el hospital después de superar el susto Emily y Felipe se dan la oportunidad de bromear sobre si les ponen los médicos y las enfermeras y que quizá luego lo recreen como una fantasía sexual cuando estén en casa, conversan un poco más y el cansancio termina por vencer a su esposa que se queda dormida contándole una anécdota de la niñez, a él le preocupa que este allí en su condición y que no esté cómoda, pero se siente afortunado de esta nueva oportunidad y del amor de su familia.Al siguiente día, el de su cumpleaños, apenas abre los ojos, Emily está a su lado para darle un beso y abrazo había planificado color globos en el apartamento y despertarlo con su desayuno favorito, pero no modo, — Feliz cumpleaños mi amor — , tomo su mano y la colocó en su vientre y con una sonrisa continuo, — Tu hijo y yo, nos sentimos dichosos de tenerte con nosotros y ojalá sea por cien años más hoy más que nunca celebramos tu vida pues te salvaste de algo que puso en peligro tu vida.—
Luego del cumpleaños de Felipe, Emily y él permanecieron en una especie de sueño entre el amor y la pasión, pero no concretaban una fecha y el ansioso novio comenzó a desesperarse, ya había pasado una semana y no parecían concretar nada, así que el sábado por la mañana, apenas despertaron él la mantuvo en la cama abrazada.— Buenos días amor, ¿amaneciste con ganas de un poco más de lo de anoche?— No, es por eso que te tengo prisionera en mis brazos, sabes que siempre tengo ganas de ti, si sucede seré afortunado, pero lo que quiero es que hablemos, ya sin más rodeos pues tu embarazo cada día avanza más, amor dime ¿para cuándo vamos a casarnos?— Sé que me estoy convirtiendo cada día más en una ballena, y quizá no voy a lucir tan linda en la boda, pero acabamos de comprometernos, ¿cuál es la prisa?— Pues nunca dejaras de ser hermosa para mí, no es por eso, pero para qué alargarlo más quiero que tengamos una boda sin más estrés del normal y que viajemos a un lugar paradisiaco o exótico
Su hermana esperaba una respuesta pues no entendía nada— Por iglesia tontita.— Ay hermana, que despistada no sé por qué no pensé en eso, ¡Felicidades!, que romántico que lo hagan, bueno eso siempre fue tu sueño, sabes que yo siempre he sido más práctica, no se no me veo casándome de manera religiosa, pero me encanta que puedas disfrutar de un momento tan romántico y ¿Cómo vas de ánimo?— Justo eso hablaba con Felipe que sentía temor de tener una explosión de llanto en una ocasión así y delante de tantas personas.— Hermana, te entiendo a la perfección, pero no debes pensar así, es duro que papá no esté, pero estoy segura que él hubiese querido que fueras feliz, verte vestida de blanco, celebrar tu unión, el quizá no esté en persona, pero confío en que continúa con nosotros no solo en nuestros corazones sino como nuestro protector.— Gracias por decirme tales palabras, viniendo de ti que estás sufriendo la ausencia de papá como yo, me llena de ánimo para continuar con estos planes de