Amora estaba cansada, cuando decidió encender su celular vio tantas llamadas perdidas.

Estaba cansada, había decidido ignorar todas las llamadas, pero fue cuando recibió una de Davi que decidió contestar.

Davi había sido una persona que tal vez pensaba que era normal, que él supiera de ella no era nada especial.

"Amora, ¿dónde estás? Ya estoy aquí en Rose Dourada. ¿Sabes lo preocupada que estoy por ti? ¿Quién es el vampiro contigo?"

"David, estoy bien, ¿estás en Rosa Dourada? Hablamos mañana por la mañana"

"Mañana por la mañana ahora no"

"David, son las 11 de la noche, ya no somos una pareja de amantes para nosotros"

"Vamos, dame tu ubicación y estaré allí en minutos"

Amora no quiso discutir con Davi y le envió su ubicación, a ella le gustaba como amigo y él también la consideraba así.

Amora estaba respondiendo a las personas que la llamaban cuando llamaron a su puerta.

Amora miró por la mirilla y no podía creer que realmente fuera David.

Tan pronto como Amora abre la puerta, David la