Oí la puerta sonar así rápidamente pensé que era Sarah habíamos quedado en ir a comer al salir del trabajo y ya se me había hecho tarde para ir por ella a su oficina, yo estaba de espaldas a mi escritorio acomodando mis cosas.— Pasa pequeña ya termine mi trabajo en un momento nos vamos — Dije asumiendo que era Sarah — Lamento no pasar por ti pero primero recompensarloNo escuche ninguna palabra de ella así que me girar, no pude evitar la sorpresa seguramente en mi rostro al ver que no se trataba de Sarah si no que es su lugar veo como Anna ¿Que rayos hace ella aquí? Antes de que pueda decir algo ella simplemente se acercó y me besa.¡¡¿Que mierda le pasa nestá mujer?!!— ¡Anna! — Exclamé al alejarla de mi lo más rápido que pude — ¡¿Que diablos te pasa?! Y ¡¿Qué haces?! ¡No te quiero cerca de mí! Ya no lo volveré a decir Anna— ¿Qué está pasando aquí? — Mierda. Mire a la puerta y ahí de pie estaba Sarah, mi Sarah y parecía molesta, desilusionada ¡¡Mierda no!!— Sarah mi amor, todo es
Wow que cosa tan hermosa.— Está preciosa está casa — Dije con sinceridad.— Era de mi madre, le encantaba pasar las vacaciones de verano aquí, tengo muchos recuerdos hermosos aquí — Nunca lo había oído hablar de sus padres y sinceramente me gustaba, los recordaba con amor — ¿Aquí no hay nadie? — Pregunté — Pensé que en estas casas los ricos siempre tienen personal — Le dije al personal que preparan todo y al terminar podía tomar el día libre, quería estar a solas contigo espero eso no te incomode ni nada por el estiloPues no era algo que quería responder — ¿Te gustaba pasar tiempo aquí con tus padres? — Pregunté — Claro que si, como te dije tengo increíbles recuerdos con mis padres y hermana menor y me hace muy feliz que hayas aceptado venir para acá conmigo me hace sentir que se cierta forma te los estoy presentando.No pude evitar sonrojarse y sentir algo dentro algo lindo, Enzo es una persona muy tierno — Supongo que eran muy unidos — No supe que más decir — No éramos perfe
— Sarah, Sarah — Aquella voz me hacía despertar así que abrí los ojos y vi a Enzo a mi lado — Ya llegamos hermosa mía — Mire a la ventana y tenía razón estábamos en la puerta de mi casa.Me acomode un poco en el asiento — Gracias Enzo, por el hermoso día de hoy — Me acerqué a él y bese levemente tus labios — te veo mañana en el trabajo— Susurré algo sonrojada.Deben entenderse con Carlos no tuve ese tipo de intimidad y a pesar de ellos cuatro años ahora que lo pienso éramos más amigos que novios pero yo sí que estaba ciega que no veía eso.No teníamos intimidad y no hablo de tener sexo o hacer el amo hablo de besos apasionados nuestros besos eran cortos.— De nada mi pequeña Sarah, yo también la pasé muy bien, hasta mañana hermosa — Dio un pequeño beso en mi nariz cosa que me pareció tierna — paso por ti para llevarte al trabajo mañana, ya falta poco para que seas mi esposa oficialmente — Podía notar cierta emoción en su voz, sonríe — Si, tienes razón ya falta poco para nuestra boda
— señor Gambino le tengo excelentes noticias — Le dije emocionada — Ya las se señorita Russo así que felicidades sabía que podía confiar en ustedes, por cierto señorita Russo el señor Miller desea verla en su oficina — asentí — Buena suerte— Voy enseguida.Salí de la oficina de mi jefe para ir a la de Enzo. Subí ascensor este me llevo hasta su piso, saludé a la secretaria quién me saludo y no me dijo nada supongo que ella le aviso a mi jefe.Toque la puerta — Adelante— ¿Querías verme?— Pregunté entrando a su oficina el sonrió al ver que era yo — Si, Ven. Acércate a mí, se que hoy llegamos juntos pero no te imaginas cuánto te he extrañado toda la mañana — Sonreí ante sus palabrasNo abrazamos y enseguida nos besamos, cada día se vuelven más adictivos sus besos.Se que apenas anoche fue que nos hicimos novios de verdad pero no puedo evitar sentirme así — Me paso algo muy emocionante el día de hoy — Le dije una vez que dejamos de besarnos.Caminamos hasta el sofá negro — ¿Qué fue
— Lo siento Sarah mejor olvida lo que acabo de mencionar, disfruta la fiesta y luego te veo — ¡Espera! — Lo detuve antes que se fuera — ¿Quiero que seas claro conmigo?— ¿Acaso importa mi opinión? — Pregunto El verdaderamente se veía ofendido — Se suponía que éramos amigos o lo fuimos en el pasado, ya no lo sé — Fuimos amigos en el pasado Sarah como tu dices, pero tal vez yo no quiero solo tu amistad— No te entiendo— Acaso jamás te diste cuenta de mis verdaderos sentimientos, sabes pensé que solo era un enamoramiento adolescente y mis sentimientos iban a desaparecer con forme pasara el tiempo pero cuando te volví a ver dias atrás, sentí como se detuvo el tiempo y mi corazón latía de emoción.— No sé que decirte, yo..— Sé que Enzo es tu prometido — Me interrumpió — pero no creo que él te vaya a hacer realmente feliz — ¿A que te refieres? — Pregunté— No puede evitar investigar un poco sobre la familia Miller, se muy bien que su posición económica es superior a la de nosotros pe
El día había estado bastante tranquilo, franco me había informado hace poco del problema resultó por Sarah y su amiga Melanie, de no ser por ellas hubiésemos tenido una pérdida.Un sonido me desconcentro de lo que hacía así que reconoci que era mi celular personal. Lo tome de una de las gavetas Mierda era Anna— ¿Que es lo que quieres? — Dije al responder — ¿Cuántas veces tengo que decírtelo Anna? No quiero nada que ver contigo y definitivamente no quiero hablar contigo ¿Por qué me llamas?— Vamos Enzo, no te enojes conmigo mi amor, yo solo me preocupo por ti, por tu corazón y tú me tratas mal, dime algo ¿Acaso sabes qué esta haciendo tu prometida en estos momentos? ¿Ahora qué va a inventarse esta mujer?— Claro que si, a diferencia de ti Sarah es una mujer trabajadora, así que en este momento ella está trabajando, ya te dije, no quiero que la molestes ni mucho menos que inventes cosas de ella — Oh mi amor al parecer no tienes ni la menos idea de lo que tú prometida está haciendo e
Maldita seas Sarah Russo, pensé que podía vencerte fácilmente pero voy a tener que ser más inteligente. Pero te prometo que esto apenas comienza, no voy a dejar que te cases con Enzo, el maldito dinero es mío y no voy a dejar que vengas tú a quitármelo — ¿Anna Rosetti? — Me gire — ¿Quién eres? — Pregunté directamente el tenía una pequeña sonrisa.Era guapo pero seguramente un pobreton— Soy Matteo Marchetti es un placer conocerla señorita Anna al fin, no sabe las ganas que tenía de encontrarme con usted — No pude evitar levanté un ceja ¿No se supone que este idiota es el amigo de la estúpida de Sarah?— Tu eres el amigo de Sarah ¿No es así?— Pregunté — Si, es correcto, pero yo tengo un interés más profundo por ella, creo que usted me comprende — Claro que te entiendo, supongo que deseas lo mismo que yo ¿O me equivoco?— Pregunté — Bueno se podría decir que si, pero considero que dos cabezas piensas mejor que una ¿Qué opinas? Yo quiero a Sarah y tu por lo visto aún quieres a Enzo,
Salí de mi recamara y baje las escaleras casi corriendo a ver qué pasaba con Enzo y que hacía aquí en mi casa, no entendía porque había regresado a verme.¿Algo malo estaba pasando?Abrí la puerta de la casa y lo encontré recargado en el coche me acerqué rápidamente a el.— ¿Cariño que haces aqui? — Pregunté una sonrisa se le formo en el rostro.¿Ahora qué?No estoy entendiendo nada— Que hermoso se escucha eso — ¿Que? — Nunca me habías llamado cariño, que bonito se escucha que me digas de esa forma, y no, no paso nada malo pequeña, solo quería verte, tal vez suene tonto pero cada vez que no estas a mi lado, te extraño demasiado y bueno ya que estaba cerca y tengo auto ¿Por qué no venir?— Yo también te extraño mucho — dije acercándome un poco más a el para así darle un pequeño beso. — Me alegra que estés aquí — Por cierto quería decirte que ya Bruno se encargo de hablar con los medios de comunicación y ya se elimino todas noticias sobre nosotros — Me dijo. Me hubiese dado gusto si