JAVIER

Es loco, pero es cierto, estoy aquí esperando a mi amigo Gerardo que es el dueño de la bodega, estoy preguntando por una total desconocida

— Sabes que te quiero como si fueras mi sangre.

— Algo quieres Javier, que tú de zalamero solo porque algo quieres, habla de una vez que tengo que ir a ver a mi amigo que anda llorando por los rincones como si el mundo se fuera a acabar.

— Benjamín, creo que se llama me contaste la vez pasada.

— El mismo, si ese, quien le manda a andar de desconfiando yo le advertí, pero, en fin, ya dime ¿Qué quieres?

— Bueno, te sonara loco o descabellado, pero este — No sé cómo decirle Gerardo mira necesito que por tus cámaras me puedas decir quién es una chica que vi hace unos días, que no se su nombre no, menos he oído su voz alguna vez, pero eso si no he dejado de pensar en ella en mi cama, en ella en mi ducha, en ella en mi cocina enredando sus piernas a mi cintura mientras yo.

— Habla de una vez — Se le ve más viejo cuando arruga e