He hablado mucho con mi madre hoy platicamos acerca de trabajos, viajes y rutinas.

–Bueno hijo creo que ya es hora de irme de igual forma nos vemos nuevamente en la casa cuando vayas a ver a la hermosa bebé de hecho espero que te haya quedado muy claro lo que tienes que hacer.

–Ok mamá–asiento.

–Por cierto, tienes que tener a la mano tus hinhaladores recuerda la última crisis que tuviste cuando eras un niño de cinco años, no quiero que te vuelvas a desmayar Como aquella vez.

–No mamá, esta ves no fue así–gracias a que dilara actuó a tiempo creo que le debo una disculpa (pienso).

–Bien mi bebé, nos vemos adiós cuidate–ella deja un beso en mi mejilla y otro en mi frente puedo oler su hermosa fragancia por cierto mi madre siempre ha olido a vainilla no sé porque pero creo que desde que yo era pequeño usa la misma fragancia.

Ella se retira de la casa y nuevamente quedo solo, es muy extraño que ella haya venido acá ella sabe que no me gustan las visitas.

Me estiró un poco creo que voy a to