Llegamos al auto y ella tenía sus ojos cerrados, debe de estar exhausta, por esa razón no le dije nada, solo quería que descansara luego de haber vivido en carne propia aquel momento abrumador.Llegamos a casa y la ayudé a bajar, al entrar nos fuimos a la sala de estar y el cálido calor hogareño hizo que nuestros cuerpos se sintieran acogedores.Acosté a dila en uno de los sofás mientras que fui a la cocina y le ofrecí un poco de té del que había preparado antes de salir a buscarla.–Gracias tayyar, pero… no tengo fuerzas para sostener esa taza–Caramba, entonces quiere que la alimente, aquí vamos jugando mi cachorrita ?–No te preocupes, yo te la daré solo abre tu boquita–Ella asiente y abre su boca, que boquita tan provocativa por Dios, desearía arrancarle un beso.La cosa continúo así, le di un poco de té a mi dulce niña y luego le busqué algo de ropa ya que su cuerpo estaba helado.En estos momentos la tengo acostada dentro de mis brazos, acaricio su cabello con la yema de mis dedo
–No quiero que tengas ningún vínculo ya sea con viera o con seher–pensé que era algo más complicado, pero esto no es la gran cosa.–por supuesto, haré lo que tú me pidas.Dicho esto ella siguió con el beso que habíamos abandonado, este se volvió más agresivo, con mordidas e intercambio de lenguas.Estaba muy desesperada, y eso me estaba poniendo incomodó, quería llevarle el paso pero no me dejaba ya que me besaba con ansias como si este fuera nuestro último beso.–Tranquila–la tomó por los hombros, para calmar su ansiedad.–Es que tengo mucho miedo de que me seas infiel así como lo hiciste con tus ex parejas–la interrumpo.–¡NO!, yo no haré nada de eso ?.–Pero tu le fuiste infiel a tus ex,y cómo no hacerlo con migo–claro era de esperarse, creo que las redes sociales se han encargado de joder mi vida personal.Aunque también fui un completo tonto al dejar que estás manipularan y entrarán en mi espacio.–¿Entonces me vas a prometer que no serás infiel conmigo?–Mira mi cielo, eso es al
–Si, sobre todo–pongo los ojos en blanco.El tierno beso de tayyar sobre mi cuello hace que mi cuerpo estremezca.–Voy a castigarte–Susurra mientras ríe.–Está bien, te doy permiso–Le dije clavando mis labios contra los suyos.Las manos de tayyar empiezan a recorrer por todo mi cuerpo, cada tocada hace que me excite más y más.Me quite el suéter por encima de mi cuello y de inmediato mis medianos melones se destaparon a la luz, la manera en como tayyar los miró fue demasiado, esos ojos verdes los analizaron con ansias parecía una hiena en busca de comida.–Me encantan tus bubis amor–me halaga y eso hace que mis mejillas ardan.Las sostiene dentro de sus manos y luego las acariciaba en círculos, ¡Que rico! ¡Qué rico! Sentir su tacto es maravilloso, es como si hiciera que mi mente viajará a otra dimensión.–¿Te gusta?–me pregunta.–Si, me encanta–exclamó llevando mis manos hacia sus hombros para apoyarme de estos.Él me pide que me quite la sudadera y yo me la quitó con rapidez, mi pant
Me encuentro acostada en los brazos de mi amor.Elevo mi rostro y me encuentro con unos ojos verdes.–¿Con sueño?–me pregunta y yo niego.–No, no tengo sueño.–Tu rostro dice lo contrario–Deja un beso en mi frente–Dila te amo, mucho.–Yo también te amo mi gruñón.Él se ríe al igual que yo Ambos hicimos el amor ? fue realmente delicioso, exquisito mejor dicho. Y ahora estamos acurrucados.–¿Lo hice bien?–Cuestiona.–Bueno, te doy un ocho de díez.–¿Porque?–Me mira impresionado y me da un pellizco.–Amor, tu pierna ?.–Bueno por lo menos no estuvo tan mal.–Pues sí, pero aún así te faltó ser más salvaje en la cama.–Juro que en cuanto me recupere, te voy hacer llegar al cielo. ?–Eso espero querido. Ambos nos abrazamos hasta quedar sumamente dormidos.A la mañana siguiente me levanté con dolor de cabeza, claro tenía mi rostro en el torso de tayyar y eso me maltrato.Me pongo de pie y me coloco un suéter de mi amor, el cual me queda enorme.Llegó hasta la cocina y preparó unos waffles
–Me encantas–Sus ojos se acaramelaron y una sensación de felicidad recorrió en mis manos.–¿Que tanto te gustó?–cuestionó–Lo suficiente como para casarme contigo.–¿De verdad?–Si, dila.No sé pero algo en él me transmite sinceridad, por primera vez, creo en él.Creo en el amor ? de sus ojos. De igual manera si miente o no, yo no tengo nada que perder ni tampoco de perdonar, aceptaré todo lo que él me diga eso sí, siempre y cuando sea verdad.–Está bien.–¿Entonces no te da coraje todo lo que escuchaste?–Niego.–No mi vida, al contrario, me enorgullece. Aunque–hago una pausa.–¿Aunque?–No será tan fácil–él sonríe con vergüenza.–Haré todo lo necesario para ganarme toda tu confianza y amor.–Te mantendré al tanto.Tomó una tajada de waffles y la llevó hasta mi boca, ese acto ruborizó mis mejillas.–Eres la princesa que tanto busqué–Sonrió.–Y tu la bestia que tanto busqué–rei.–¿Bestia?–me miró confundido.–Bueno…es solo que escapo de mi boca, pero en realidad no quise decirlo–en rea
-Hijo, ¿Que hacías?-escuche la voz de su amada madre.-Emm, estaba un poco ocupado.-¿Cómo has pasado campeón?-preguntó su padre.Tenía tanta vergüenza de que ellos me vieran con este suertes por ello decidí correr al baño.Me mire al espejo y estaba toda desgreñada con el cabello hecho un desastre y lo más sobresaliente de todo es el tremendo suéter de Tayyar.¿Y ahora qué hago? Tayyar.-Hijo, huele muy bien aquí-mi madre se asoma a la cocina.-Si, estoy haciendo algo rico para ustedes-¿Dónde estará Dilara? Estaba hace un momento aquí, y ya desapareció.-Hijo, ¿Cómo van tus heridas?-Dijo mamá.-Están sanando.Noté a papá muy preocupado, no sé si estaba en este mundo o no, me imagino que estará preocupado por mi condición física.-Hijo y dónde está Dilara?-Volvió a preguntar mamá mientras prueba la sopa.-Este…Debe estar limpiando-Respondí mirando para todos lados, ¿Dónde se ha metido ahora? -Hijo dame un momento-Mi padre me llama con su dedo.Me acerqué a él.-Vamos al jardín-Susur
La comida estuvo muy buena, el señor Yusuf no dejaba de mirar mi tremendo suéters, pero luego me acostumbre a su incómoda mirada, mientras que la señora Emily nos contaba un poco acerca de las nuevas flores que llegaron a su floristería.-Hijo, es hora de que nos vayamos-dijo su madre acabando su comida.Cómo dicen por ahí, Nicolás ya comiste ya te vas, reí por dentro al recordar ese viejo dicho.-Está bien mamá, los acompañó-Tayyar tratando de ser amable con sus padres. Que lindo.Ya los padres de Tayyar se han ido y la casa volvió a la normalidad, me refiero a una tranquilidad que relaja.-Amor, creo que ya llegó tu ropa-dijo tayyar asomándose a la ventana.-Que bien.Un hombre de más o menos cuarenta años fue quien trajo el pedido, es una caja enorme.Estaba nerviosa por abrirla.-Vamos, ábrela-me dice tayyar mientras sonríe de felicidad.Estaba esperando que me diera la orden.Empecé a abrir la caja con mis manos temblorosas, y de inmediato una sonrisa se dibujó en mis labios.-¿T
La tarde llegó y con esta, unas cuantas carcajadas de tayyar, estaba tan feliz luego de haber hecho la transmisión.Y qué decir de mí, me sentía en las nubes con este hombre.Tayyar.Mientras estoy besando los labios de mi nena, mi teléfono timbra, no quería contestar pero Dilara me obligó a hacerlo.-Hola-Dije.-Hola mi vida-Maldita sea, es Logan, como se atreve a llamarme. O es que acaso cree que yo no me he enterado de todas las barbaridades que ha hecho.-Logan-Le respondo con una risita. Y de inmediato Dilara me miró enojada, estaba celosa.Coloque mi dedo en mi boca dándole una seña de que guardara silencio. Ella asintió.Luego colocó el teléfono en altavoz y fue ahí donde ella se tranquilizó.-¿Cómo van tus heridas?-preguntó él.-Están sanando-Le respondo con tranquilidad, aunque por dentro me estoy muriendo de la irá, por ir a golpear su rostro de mujer.-Me alegra. ¿Y cómo van los negocios en la empresa?-Bueno, te tengo malas noticias-le dije.-¿Qué te pasó esta vez?-Respond