"¿Qué tienen de interesante las canas? Solo son pelos grises. ¿No puedes imaginarlo en tu mente?". La respuesta de Avery dejó a Cole sin palabras.

"¿Por qué siento que me estás molestando a propósito?", murmuró Cole.

"No me quejé de tu pelo grasoso, ¿pero estás diciendo que te estoy molestando? Si realmente quisiera meterme contigo, simplemente podría decirle a tu tío que lo hiciera. No solo te arrancaría el pelo, sino que te arrancaría toda la cabeza".

La cara de Cole palideció mientras el miedo se apoderaba de él. "¿No dijiste que mi tío no es tan despiadado como yo pensaba?".

"Así es. ¿Crees que estarías vivo si lo fuera? Si no fueras su sobrino, hubieras muerto hace mucho tiempo", dijo Avery. "Me voy después de terminar mi café".

Cole se quedó atónito un momento y luego dijo: "¿No me pediste que saliéramos a hablar? ¿De qué querías hablar?".

"Ya terminamos de hablar". Avery tomó un sorbo de café y luego lo miró. "Solo quería saber cómo estabas. Ahora que sé lo mal que te ha i