De vuelta a la villa Río Estrellado, Avery se sentía mucho mejor que durante el día.

A pesar de que se sentía un poco agotada, ya no le dolía el estómago.

Después de una cena cálida y agradable, llevó a los dos niños a la sala de estar y sacó los regalos que ella y Elliot habían preparado para ellos.

Elliot le había pedido que no les dijera que esos regalos eran de él, pero ella no podía cumplir esa petición suya porque no quería mentirle a los niños.

"¿Por qué hay cuatro regalos, mami?". Los ojos de Layla brillaron al mirar las cuatro cajas de regalo.

Ella estaba muy emocionada por abrir los regalos.

"Mami compró estos dos y papi los otros dos". Avery se esforzó por prestar especial atención a la expresión de Hayden cuando dijo eso.

Cuando Hayden escuchó la palabra “papi”, su cálida expresión se volvió fría en un instante.

"¡Vamos a abrir los regalos y a ver qué hay dentro!". Avery agarró el regalo que Elliot había comprado primero porque sabía que Hayden se iría si abría su r